China ha mantenido su posición como el segundo mayor receptor de inversión extranjera del mundo desde 2017 y sigue siendo uno de los destinos de inversión más atractivo a nivel mundial.
A pesar de la creciente ola de desglobalización y proteccionismo, China se ha mantenido comprometida con una apertura de alto nivel para impulsar la inversión extranjera, proporcionando la certeza y las oportunidades tan necesarias para los negocios globales.
En su calidad de segunda economía más grande del mundo, primer país a nivel comercial, y un imán importante para los inversores globales, China, a través de una apertura más amplia, no solo impulsará su desarrollo de alta calidad, sino que también creará amplias oportunidades para el mundo, señalaron los oradores invitados a la tercera edición de la Mesa Redonda Económica de China, una plataforma de diálogo de todos los tipos de medios organizada por la Agencia de Noticias Xinhua.
Mientras busca un desarrollo de alta calidad, China ha venido trabajando para ampliar la apertura institucional con respecto a las normas, regulaciones, gestión y estándares, en un esfuerzo por aumentar el nivel y la calidad de la cooperación comercial y de inversión.
«La apertura institucional será la pieza central de la apertura de China al mundo exterior», dijo Zhang Wei, vicepresidenta de la Academia China de Comercio Internacional y Cooperación Económica, dependiente del Ministerio de Comercio.
Zhang añadió en la mesa redonda que los sólidos fundamentos económicos de China se han mantenido sin cambios, con cadenas industriales y de suministro competitivas, mientras que se espera que su ventaja de contar con un vasto mercado interno se fortalezca aún más.
«La ampliación de la apertura institucional será una forma efectiva y un fuerte apoyo para el desarrollo de alta calidad del país», afirmó Zhang.
En su decisión más reciente al respecto, en diciembre de 2023, el Consejo de Estado, el gabinete chino, emitió un plan integral para promover la apertura institucional de alto nivel de la Zona Piloto de Libre Comercio de China (Shanghai), alineándola con normas económicas y comerciales internacionales de elevados estándares.
El plan incluye un total de 80 medidas, tales como iniciativas orientadas a facilitar el comercio de bienes y servicios, promover el comercio digital y fortalecer la protección de los derechos de propiedad intelectual, entre otras.
La ampliación de la apertura institucional sirve como una garantía para los inversores extranjeros, ya que el país se enfoca en facilitar aún más el acceso al mercado y garantizar una competencia justa, manifestó Zhao Yugang, funcionario del comité de gestión de la Zona Piloto de Libre Comercio de Shanghai.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China comunicó el jueves que en 2024 el país seguirá ampliando la apertura de alto nivel, facilitará aún más el acceso al mercado, y compartirá con el mundo las nuevas oportunidades generadas por la modernización del país.
Un acceso más fácil al mercado
En el marco de la política de apertura de alto nivel, China ha emitido una serie de medidas para facilitar el acceso al mercado y ofrecer igualdad de condiciones, de modo que las empresas extranjeras puedan disfrutar de un mejor entorno empresarial en el país.
El año pasado, China renovó el Catálogo de Industrias Incentivadas para la Inversión Extranjera, añadiendo 239 artículos, lo que representa un récord histórico.
Al mismo tiempo, el país también está tratando activamente de bajar de forma continua el umbral y reducir los costos y riesgos asociados con la inversión extranjera. El número de industrias y de productos en las listas negativas a nivel nacional y para las zonas piloto de libre comercio se ha reducido a 31 y 27, respectivamente.
En cuanto al sector financiero, el país implementó más de 50 medidas de apertura financiera en los últimos años, incluyendo la eliminación de las limitaciones a la propiedad extranjera en los sectores bancario y de seguros, así como la reducción de los criterios de acceso para los inversionistas extranjeros.
La Conferencia Central de Trabajo Económico, celebrada a fines de 2023, hizo énfasis en la necesidad de realizar esfuerzos para fomentar nuevos impulsores del comercio exterior, consolidar el desempeño general del comercio exterior y el capital extranjero y ampliar el comercio de bienes intermedios, el de servicios, el digital y la exportación transfronteriza de comercio electrónico.
En la reunión, en la que se estudian y definen las medias que regirán el funcionamiento de la economía nacional en el año siguiente, también se señaló que se debe facilitar el acceso a los mercados en las áreas de telecomunicaciones, servicios médicos y otras industrias de servicios, al mismo tiempo que se pidió hacer mayores esfuerzos para alinearse con las normas económicas y comerciales de alto nivel mundiales, resolver cuestiones como el flujo de datos transfronterizos y la participación equitativa en la contratación pública, y hacer que «invertir en China» sea una opción popular.
La reunión ha transmitido la señal positiva de que China continuará ampliando la apertura y atrayendo más inversión extranjera, lo que dará a los inversores extranjeros expectativas estables y cubrirá la «incertidumbre» del entorno externo con la «certeza» de la apertura, comentó Zhu Bing, director del Departamento de Administración de Inversión Extranjera del Ministerio de Comercio.
De cara al futuro, Zhu dijo que el país tiene muchas condiciones favorables para atraer inversión extranjera, y agregó que el país abrirá más sus puertas al mundo. Según él, las multinacionales continuarán expandiendo su presencia en China y compartirán los dividendos del desarrollo económico de alta calidad de China, ya que «invertir en China significa invertir en el futuro».
Un mejor entorno empresarial
China ha ido intensificando sus esfuerzos para crear un ambiente de negocios de alto nivel que esté orientado al mercado, basado en la ley e internacionalizado.
El 1 de enero de 2020 entró en vigor la histórica Ley de Inversión Extranjera que incluye un conjunto integral y fundamental de normas legales para los inversores extranjeros que tiene como objetivo proteger mejor los derechos e intereses de estos últimos.
Con disposiciones unificadas para la entrada, la promoción, la protección y la gestión de la inversión extranjera, la Ley de Inversión Extranjera de China ha abordado las preocupaciones de las empresas extranjeras y ha facilitado la inversión extranjera.
Según un informe publicado por el Centro de Investigación para el Desarrollo del Consejo de Estado, China ha mantenido su posición como el segundo mayor receptor de inversión extranjera del mundo desde 2017 y sigue siendo uno de los destinos de inversión más atractivo a nivel mundial.
Zhang Wei expresó que el atractivo de China para la inversión extranjera ahora radica en sus ventajas integrales, que incluyen un rendimiento adecuado de los costos, instalaciones de apoyo bien desarrolladas y un entorno empresarial optimizado, así como una gran cantidad de oportunidades.
Zhang agregó que el país no solo puede ofrecer un entorno empresarial propicio para que los inversores extranjeros operen y prosperen, sino que también puede proporcionar un amplio espacio para un mayor desarrollo y rentabilidad.
Artículo originalmente publicado por Xinhua.