El pueblo mapuche necesita vivir en su territorio para existir. Así es para la Lof Lafken Winkul Mapu. Sin embargo, y a pesar de ser un derecho consagrado, según Parques Nacionales, jueces y fiscales funcionales al poder económico, eso no es viable.
Las mesas de diálogo que se celebraron con el gobierno argentino para dar solución al conflicto, han resultado una farsa. En la última, del 1° de junio del 2023, se había logrado el reconocimiento del rewe como territorio sagrado, acordando el retorno de la machi junto a sus colaboradores más cercanos. Después de seis meses esperando la formalización escrita del acuerdo, el 5 de diciembre la machi Betiana viajó a Buenos Aires y ahí se encuentra con la puerta cerrada del INAI, que se niega a firmar.
De vuelta a Bariloche, ya con el nuevo gobierno instalado, las comunidades expresan su preocupación frente a la incertidumbre del retorno de la machi al rewe.
El 28 de este mes la acompañamos al territorio para visitar el rewe. Fue desolador atravesar los signos del ultraje: lo que antes fueron sus rukas hoy son montículos de maderas quemadas, tiradas con los restos de juguetes de sus pichis. Todo está destruído, abandonado.
Un sentimiento fuerte me invade: ¿cómo puede una mente humana planificar tanta crueldad? ¡En este espacio encontró su sentido y su armonía una comunidad! ¡Es incomprensible!
Las lamuen (hermanas) buscan el lawen (plantas medicinales), prenden el fuego y realizan su ceremonia.
Al dia siguiente el 29 de diciembre, en el Centro Cívico de Bariloche, varias lof (comunidades) mapuche, organizaciones ambientalistas, artísticas, sindicatos y medios alternativos, realizan una concentración, pidiendo el restablecimiento de la Ley Anticianuro 3981/05, derogada hace 12 años. Esta ley ha sido el fruto de años de luchas, por eso es considerada por los activistas de la región una conquista popular que frenó la megaminería en la provincia.
En esa ocasión la machi Betiana toma la palabra y recuerda que después de más de 1 año del brutal desalojo, su comunidad Lafken Winkul Mapu se encuentra todavía fuera de su territorio y el rewe militarizado. Después de la campaña del desierto es el primer rewe lawen–medicina con una machi, en territorio patagónico, por eso tiene un significado tan especial para el pueblo mapuche. Se levantó para traer sanidad al pueblo mapuche y a todas las personas que creen en sus tratamientos con plantas medicinales.
“Ese rewe nos da la vida –expresa la machi–. Está en juego nuestra salud y la de nuestros pichikeche (niños). Defender los territorios es lo que nos moviliza como mapuche. Nuestro espíritu está conectado con la tierra, con cada espacio. Defender los territorios es defender el agua que baja de ellos, la misma agua que tomamos todos. Nuestras luchas se unen”.
Luego termina convocando el 14 de enero a las 6 am en Diarco, a realizar un Nguillatun en el territorio para pedir el retorno a su lugar ceremonial sagrado.
Los derechos se conquistan poniendo el cuerpo. Esa es la resistencia de la Lof Lafken Winkul Mapu en el territorio. Rafita Nahuel asesinado por construirla; Jessica Bonnefoi, todavía en cárcel domiciliaria; otros integrantes de la loft con orden de captura, lo saben bien, por eso siguen viviendo el hostigamiento de un capitalismo perverso e ignorante y una sociedad que no termina de reconocer sus raíces originarías.