¡Nada por encima del ser humano y ningún ser humano por debajo de otro!

Con este principio humanista, Mundo sin Guerras y sin Violencia – Perú (MsG) realizó la primera Velatón por la Paz en Palestina, junto a otros organismos como el Mensaje de Silo, el Centro de Estudios Humanistas Nueva Civilización, COPEHU Perú, la Coalición Internacional por la Paz, la Asociación Islámica del Perú, el Club Palestino, el Instituto Schiller y ciudadanos de a pie que se dieron cita frente a la Embajada de Israel el pasado martes 14 de noviembre.

Con este significativo evento, Lima se une al pedido de cese al fuego en la Franja de Gaza, que vienen realizando miles de ciudadanos e instituciones de otras ciudades como Londres, París, Estambul, Berlín, El Cairo, Tunez, Bagdad, Nueva York, México, Jordania, entre otras.

La manifestación permitió sensibilizar a los transeúntes que se trasladaban por el distrito de San Isidro, donde se ubica la Embajada de Israel, quienes asentían en los pedidos por la paz, por no más muertes y no más bombardeos.

En el contexto de emergencia y de discurso de violencia que vive el país, el frontis de la Embajada contó con un contingente policial que registraba el evento y a los asistentes; por lo que Liliana Loayza se acercó a estos para entregarles el Manifiesto por la Paz y la Noviolencia en el mundo, considerando que el personal policial “también aspira a un mundo diferente, quieren la paz y día a día se enfrentan a la criminalidad”.

Por su parte, Luis Mora, miembro de MsG señaló: “Más que vivir construyendo muros, que estar construyendo guerras, de tener fábricas de armas; dejemos de fabricar armas y fabriquemos la vida, fabriquemos el desarrollo, el progreso para  nuestros pueblos, para los pueblos de Palestina, israelitas, cisjordanos… pedimos el desarrollo para los pueblos”.

La Velatón por la Paz culminó con la ceremonia por la Paz, la No Violencia y Reconciliación realizada por Mary Reátegui quien megáfono en mano señalaba:

“Buenas noches, los integrantes de Mundo sin Guerras, Humanistas y  Convocantes, saludamos a todos los aquí presentes, familiares queridos, amigos entrañables, otros más con los que recién nos encontramos; en todos nosotros hay algo común que nos permite  reconocernos, algo grande y muy profundo que nos relaciona:

Consideramos a la vida humana como máximo valor por encima del dinero, del Estado, de la religión, de los modelos y de los sistemas sociales.

¡Nada por encima del ser humano y ningún ser humano por debajo de otro!

Consideramos que en nosotros hay fe; fe en la vida, fe en nosotros mismos, en nuestras mejores aspiraciones, en ser las mejores personas que podamos ser, dando cumplimiento a esa Regla de Oro que nos recuerda “Tratar a los demás como queremos ser tratados”.

Consideramos también que en nosotros hay esperanza; esperanza en nuestra especie, que un día el ser humano se ponga en pie y honre a la tierra humanizándola; repudiando toda forma de violencia que se pretenda ejercer contra el ser humano en cualquier lugar del planeta.

Para que esto sea posible, a los que así lo deseen, acompañémonos en un acto libre, valiente y profundo, que sea además un compromiso de reconciliación:

Tomemos una bocanada de aire y llevemos ese aire al corazón, imaginemos que cambiamos el rumbo de nuestra vida hacia la paz, la noviolencia y la reconciliación….

Tomemos una nueva bocanada de aire y llevemos ese aire al corazón, pidamos por una Nación Humana Universal donde nos hermanemos las razas, las religiones; pidamos por una Nación Humana Universal donde haya justicia; pidamos por una Nación Humana Universal donde vivamos en resonancia armoniosa con todo lo existente…

Intentemos sentir que algo nuevo nace hoy en nosotros hacia la alegría de vivir, hacia el amor…

Hacemos votos porque este pedido nos inflame y podamos compartir con el corazón abierto este mensaje de reconciliación y apertura hacia un nuevo ser humano solidario y no violento.

¡Paz, fuerza y alegría para todos!”.

El evento culminó con el abrazo fraterno entre los asistentes y con la firme convicción de seguir pidiendo por la Paz en Palestina y en todo lugar donde haya actualmente guerras.