A sus 26 años Tanico Cussomba Carlos (Tanny Sax) sueña con llevar la música de Angola por el mundo, los sonidos de su país expresados en la que es su otra voz: el saxofón.
Deseo elevar el nombre de Angola en el extranjero, confesó a Prensa Latina minutos antes de lo que sería su concierto debut como solista, luego de 10 años de estudio y trabajo junto a otros músicos.
“Nuestra música está muy encerrada en el país. Tampoco tenemos la cultura de tener saxofonistas, instrumentistas en general, por lo que mi idea es expandir ese concepto de música instrumental dentro y fuera de Angola”, afirmó el joven.
Su propuesta abraza el jazz, el blues, el soul…, pero también los ritmos de su tierra, pues está decidido a conquistar con su saxofón no solo a un público conocedor de las melodías habitualmente tocadas en ese instrumento, sino que espera llegar a la juventud.
“Hago kizomba, semba y música popular angoleña. Mi intención es tomar esas músicas y llevarlas al exterior en formato instrumental. Lo común en el mundo es que el saxofón se vincule con el jazz, el blues, el soul, pero es raro vincularlo con los ritmos nuestros, y esa es mi apuesta, tanto para ganar al público joven como para llevar mi música más allá del país”.
Reconoció que actualmente hay muy pocos espacios en Angola para el tipo de trabajo que hace, y también muy poca promoción, lo cual igualmente influye en que exista poca costumbre de consumir esos formatos.
Mas, aseguró no rendirse. “Yo pienso luchar y luchar hasta acostumbrar el oído de las personas a este tipo de música instrumental con nuestros estilos”, enfatizó.
Tanny Sax, quien empezó a tocar a los 16 años en el centro de formación Obra Bella, del Ministerio de Administración Pública, Trabajo y Seguridad Social, toca también la flauta, un instrumento que aprendió solo durante la pandemia.
Su pasión, sin embargo, es el saxo, al cual ha dedicado sus estudios y su carrera, si bien no pretende abandonar la flauta.
“Siempre soñé ir a Cuba”, reveló en la conversación con Prensa Latina. “Tengo un tío que estudió 30 años allí y siempre habla muy bien del sistema educacional cubano, la formación musical”.
En su historia personal igualmente hay un pedacito de la isla, pues tuvo profesores cubanos durante sus estudios, de ahí que uno de sus deseos era hacer el nivel superior en música en la universidad de las artes en Cuba, pero nunca tuvo la posibilidad.
“Creo que Cuba podría ayudar a Angola en la formación de los nuevos músicos, tenemos jóvenes con talento y escasez de escuelas. Sería muy bueno si pudieran apoyar al país en esta materia”, expresó.
Tras su debut como solista, ocurrido el pasado 5 de octubre con un concierto en el Museo de Historia Natural en Luanda, bajo el auspicio de Atelier D’Artes Lucengomono, Tanny comenzará el próximo mes con la grabación de un disco.
“Trabajaré versiones para el saxofón de músicas populares de Angola, comentó. Si pudiera estrenarlo en Cuba sería mucho mejor”.