En su primer comunicado oficial la UA anuncia la suspensión estará vigente hasta el retorno del orden constitucional y anuncia sanciones.
El anuncio se conoció el día 22 de agosto a través el Consejo de Paz y Seguridad de la organización y la medida que se toma sigue la línea habitual de la UA frente los golpes de Estados que se han vivido en el continente. Por otra parte, la UA convoca al rechazo total al golpe y a evitar cualquier señal que pueda significar un respaldo a lo que, en el comunicado, se denomina como «régimen ilegal». Adicionalmente, se anuncian sanciones para todos los miembros de la junta militar instalada y a todos quienes han participado en la retención del presidente Bazoum y su familia, cuya inmediata liberación es una exigencia de la UA.
En este escenario, las posiciones de los diferentes bloques africanos, de organizaciones y comunidad internacional, coinciden en que es indispensable trabajar en torno a una salida diplomática y, al parecer, el paso más significativo lo ha dado la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO): el pasado 19 de agosto una delegación de este organismo tuvo una primera conversación con el general Tchiani, quien lidera la junta militar. Aunque no se conocieron detalles, la reunión fue calificada positivamente.
Hace aproximadamente un mes, el 24 de julio, el presidente de Níger, Mohamed Bazoum, fue destituido por un grupo de militares. A partir de ese momento, se ha instalado una junta militar en el gobierno del país, mientras el presidente y su familia permanecen retenidos. La junta ha nombrado ya un primer ministro y presentó un plan de tres años para el retorno a la democracia, que ha sido rechazado por los actores de la región.