Durante la conmemoración del 78 aniversario del bombardeo de Hiroshima, la Secretaria General Adjunta Nakamitsu leyó el discurso de António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas. «Durante mis visitas a Hiroshima, nunca han dejado de conmoverme e inspirarme mis encuentros con los valientes hibakusha, el rostro humano del cataclismo nuclear. Son un poderoso símbolo de perdón, esperanza y resistencia», comenzó diciendo el Secretario General.
A continuación recordó: «La sombra nuclear que se cernía sobre la Guerra Fría ha vuelto a surgir. Y algunos países están agitando temerariamente el sable nuclear una vez más, amenazando con utilizar estos instrumentos de aniquilación. Ante estas amenazas, la comunidad mundial debe hablar al unísono. Cualquier uso de armas nucleares es inaceptable. No nos quedaremos de brazos cruzados mientras los Estados con armamento nuclear se apresuran a crear armas aún más peligrosas».
La ONU ha lanzado un nuevo Programa de Paz cuyo núcleo es el desarme nuclear: «La única forma de eliminar el riesgo nuclear es eliminar las armas nucleares. Las Naciones Unidas seguirán trabajando con los líderes mundiales para fortalecer el régimen mundial de desarme y no proliferación, incluso mediante el Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares y el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares. La eliminación de las armas nucleares sigue siendo la principal prioridad de las Naciones Unidas en materia de desarme», concluyó.
