El periodista saharaui Mohamed Lamin Hadi, detenido en Tifelt 2, y que fue condenado a 25 años y 6 años en aislamiento, ha iniciado una nueva huelga de hambre por tratos crueles y negligencia médica que amenazan su vida.
Su familia pide a ONGs internacionales apoyo para proteger sus derechos.
La situación de los periodistas que se atreven a denunciar la situación de ocupación y la violencia, que sufre permanentemente el pueblo saharaui por parte del Gobierno marroquí, es siempre muy arriesgada y en no pocas ocasiones terminan en prisión.