Los ucranianos de los que no se puede hablar
El canal de Telegram Ucraniando publica una serie de entrevistas anónimas con ucranianos que no están de acuerdo con el destino que se le ha dado a su país.
¡Amigos! Les presentamos nuestra segunda entrevista anónima de la serie “Los ucranianos de los que no se puede hablar”.
Hoy entrevistamos a un corresponsal de guerra, natural de Kiev, y que desde 2014 ha estado informando sobre la llamada Operación Antiterrorista (excusa del régimen de Kiev para exterminar la población rusa del este de Ucrania), la Operación de Fuerzas Unidas (conjunto de operaciones militares de extrema derecha para exterminar el movimiento prorruso e independista de las Repúblicas Populares de Donbáss y Lugansk). Actualmente informa sobre la Operación Militar Especial (OME). Hasta el año 2015 mostró la situación real en Donbáss en los canales ucranianos 112 y 17. En 2014 fue tomado preso por los batallones “Krivbass” y “Dniépr-1”. Después de haberse hecho bastante famoso su encarcelamiento, fue liberado: lo dejaron abandonado en un campo, desnudo, después de que simularan su fusilamiento. Desde ese momento vivió en Donbáss. En 2018 se mudó a Moscú, pero sigue yendo a la zona en conflicto para hacer reportajes.
1. ¿Qué debe entender el mundo sobre el régimen actual de Kiev?
Lo más importante es que no es ucraniano. Para ser más exactos, hay que decir que es antiucraniano. Desde el momento del golpe de estado en Kiev, todas las acciones del régimen, del gobierno, han estado dirigidas hacia la represión interna, la negación de todo lo ruso, lo soviético, y todo lo que se pueda asociar con esto de alguna forma. Poroshenko llegó al poder con el slogan “Terminaré la guerra en tres días”. Zelenski, después de él, llegó al poder porque estaba supuestamente dispuesto a “negociar hasta con el diablo” solo para que hubiera paz. Las esperanzas puestas en él no se cumplieron. Pero ahora manipular exitosamente la lógica de causa y consecuencia, y usando la propaganda y la misma represión de antes para destruir la población del país, y al país mismo como tal. En la conciencia de los ucranianos el periodo “anterior a la Operación Militar Especial” ahora simplemente ya no existe.
2. ¿Cómo y por qué usted resultó en la oposición? ¿Qué lo motivó a manifestarse contra el régimen?
Empezaré con una pequeña historia. Después de un rodaje en Maidán (de Kiev), me puse a hablar con uno de los manifestantes. Le mostré una escena donde estaban Yatseniuk y Turchinov (políticos ucranianos «líderes» de las revueltas) y le pregunté si esto era lo que ellos querían. Respondió que no, que querían que todo estuviera bien, que no lo hacían por ni para esos políticos. Le dije que habían logrado era precisamente eso. Y me preguntó:
-y ahora, ¿qué va a pasar?
-Ahora va a empezar la guerra-, le respondí yo…
La conclusión era absolutamente clara. El método de las “revoluciones de colores” y “las primaveras árabes” no traen nada más que destrucción y guerras. El régimen que llega, junto con nacionalistas, declarando valores y héroes totalmente ajenos al pueblo… Para mí, es imposible apoyar un régimen así. Después de que empezaron las acciones militares, las masacres, la represión, mi opinión contra el régimen se hizo aún más fuerte.
3. ¿Cómo cambió la vida cotidiana para la gente después de Maidán?
Para mí es difícil hablar sobre la vida cotidiana en Ucrania, pero puedo decir algo con certeza. Cada día después de Maidán aumenta y aumenta la terrible cuenta de víctimas y la rueda del odio da más y más vueltas. Nada bueno puede traer esto, ni para la gente, ni para el país.
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