El canal de Telegram Ucraniando publica una serie de entrevistas anónimas con ucranianos que no están de acuerdo con el destino que se le ha dado a su país.
Aquí va la primera con un activista de izquierda que sufrió en carne propia la persecución y acoso de los radicales de ultraderecha en 2014 y ahora vive exiliado fuera de Ucrania:
¿Por qué muchos ucranianos votaron por salir de la URSS en el referendum de 1991?
Porque no nos dejaron otra alternativa a la caída y disolución del país. Recordemos que el 17 de marzo de 1991 en Ucrania se realizó un referéndum general para que los ciudadanos expresaran su opinión sobre el futuro del país. El 70.2 por ciento de los votantes respondió afirmativamente a la pregunta “¿Está usted de acuerdo con que Ucrania haga parte de la Unión de estados soberanos soviéticos con base en la Declaración de Soberanía de Estado de Ucrania?”. El 80.2 por ciento de los votantes apoyó el proyecto de incluir a Ucrania en la Unión de Estados Soberanos Soviéticos, como se planeaba llamar a la nueva y renovada variante de la URSS. Pero al final del año la situación cambió cardinalmente. Después de los hechos de agosto el país empezó a diluirse a pasos agigantados. El 24 de agosto la Verjóvnaya Rada (Rada Superior), sin consultar con el pueblo, declaró la independencia. El 1 de diciembre de 1991 el país realizó un nuevo referéndum con una sola pregunta sin alternativa: “¿Apoya usted el acta de declaración de independencia de Ucrania?”.
La gente votó afirmativamente porque lo que vieron fue que la URSS no existía ya más, y los nacionalistas, junto con la élite del Partido Comunista de la URSS les prometieron una vida libre y con los estómagos llenos. Nadie les dijo que entre la República Soviética de Ucrania y la República Rusa Soviética aparecerían fronteras y más tarde, una línea de frente.
Por todo el país se empezaron a difundir millones de ejemplares de pasquines diciendo que Ucrania era un país muy rico y que florecería en la medida en que pudiera enviar su producción y recursos a otros países. El futuro presidente Leonid Kravchuk empezó a llevar a cabo un llamamiento acerca de que en el país nadie perseguiría ni a la lengua rusa ni a los rusos étnicos.
Así que esto fue un engaño. Se empezó a robar lo que se había logrado construir durante la era soviética bajo la excusa de la privatización, la gente quedó en la miseria, la población empezó a morir o emigró a otros países para poder trabajar. Los nacionalistas, a su vez, llegaron al poder y obtuvieron el financiamiento de occidente, realizando así su programa político. La catástrofe ucraniana actual tiene sus raíces en ese momento histórico.
– ¿Cómo cambió la vida cotidiana después de 1991 y 2014?
Sobre esto se puede contar muchísimo, un libro no sería suficiente. Básicamente se abrió una grieta social: una mayoría pobre y una minoría rica que controlaba el país y robó la propiedad antes socialista para vender sus servicios políticos a occidente.
Los derechos de la gente del común fueron restringidos y hasta liquidados. Pero hasta el 2014 el proceso fue lento, entre otras cosas, porque había organizaciones de izquierda que lo impedían y tenían influencia en el país, especialmente a finales de los años 90. Además, en la Ucrania antes del “Maidán” varios grupos financieros y políticos estaban en continua competencia, grupos de familias y clanes, y el poder centralizado era relativamente débil, lo que permitía cierto nivel de democracia. Por lo menos la gente podía hablar y escribir lo que pensaban, en el idioma que querían, y la gente de izquierda podía salir libremente a las manifestaciones con sus propias banderas.
Después del golpe de estado del 2014 en el país se empezó a construir un régimen totalitario que, sin exagerar, se puede llamar el más de ultraderecha en la historia contemporánea, incluso si tenemos en cuenta los países de Medio Oriente. La libertad fue cambiada por censura, y los paramilitares nacionalistas obtuvieron el derecho de golpear o matar a cualquier disidente, con la autorización también de los nacionalistas ucranianos “liberales”.
-¿Quiénes son los rusos para los ucranianos?
Rusos y ucranianos son dos pueblos cercanos que vivieron en paz durante siglos y juntos vencieron a la Alemania Nazi, al lado los otros pueblos de la Unión Soviética. Todo fue así hasta que en Kiev se consolidaron los partidarios de una dictadura de ultraderecha con el apoyo de EEUU y los hijos de colaboradores nazis de la mitad del siglo XX.
– A veces se dice que los rusos y los ucranianos tienen una mentalidad diferente, ¿en qué radica esta diferencia?
A mí me parece que no es muy diferente. La gente puede ser humana o salvaje sin importar su nacionalidad. La pérdida de lo humano se determina por el ambiente social, a través de la propaganda que quiere dividir a los humanos entre “nosotros” y “ellos”.
En la práctica vemos que entre los ucranianos nacionalistas hay muchos rusos étnicos que a duras penas hablan en ucraniano. Mientras que entre las víctimas, por el contrario, hay muchos ucranianos étnicos.
– ¿Cómo desnazificar Ucrania?
Esta es una pregunta muy difícil para responder en pocas frases. Solo diré que la batalla hoy es necesaria, hoy más que nunca, porque de su destino depende el destino del mundo (incluyendo el de América Latina).