Qué lamentable por quienes hayan apoyado a Boric que promulgó en tiempo récord la ley represiva, ley maldita o maldita ley bien llamada del “gatillo fácil”. Y así han sacrificado a sus mejores cuadros en esta actitud errónea.
Y sorpresa: doña Carolina Tohá se ubicó más a la izquierda que Camila Vallejo y se retiró molesta y muy dignamente del Senado porque rechazaban todas las indicaciones del gobierno. Felicitaciones, Carolina, esta vez has honrado a tu padre.
El problema es que hay que diferenciar muy bien a la delincuencia de las protestas callejeras. Porque es en éstas donde los carabineros -a mí me gusta decir pacos, porque no pienso cambiar el lenguaje que se ha usado siempre- repito, es en los desfiles de protesta donde los pacos han hecho siempre un uso excesivo de la fuerza. Ya se ha repetido hasta el cansancio y no se debe olvidar, que ellos mataron a más de 40 personas en las protestas de octubre de 2019. Acostumbran a disparar a la cara y han dejado tuertas y ciegas a muchas personas, entre ellas a la senadora Fabiola Campillai y arrojaron al Mapocho a un joven que salvó la vida gracias a que sus compañeros lo rescataron rápidamente.
Ahora bien, en todo régimen democrático el pueblo tiene derecho a manifestar en la calle su protesta contra medidas gubernamentales que afectan sus intereses o que no resuelven sus problemas. Eso se llama libertad de expresión y es lo que está sucediendo en Francia. Quizás la policía francesa les arroje a veces gases lacrimógenos, pero disparar a matar, jamás de los jamases.
Ahora mataron a otro carabinero ¿fueron protestas estudiantiles? No, fue la delincuencia organizada, que puede estar especializada en diferentes delitos, como narcotráfico, robo de autos, asaltos de casas u otros. Y contra la delincuencia organizada no sirve aumentar las penas ni garantizar la impunidad de los pacos. A los delincuentes nunca les han importado las penas, porque suponen que no van a ser descubiertos ni apresados. Y si están cometiendo un delito, un robo, un asalto, un secuestro y ven acercarse a un carabinero, no dudan en disparar
En los desfiles y manifestaciones de protesta estudiantiles y populares, que yo sepa jamás se ha comprobado que una persona lleve un arma de fuego.
¿Se va a acabar la delincuencia con esta ley? Claro que no, la verdadera delincuencia requiere buenas investigaciones, investigadores que no sean corruptos y también carabineros que no sean de gatillo fácil, porque los delincuentes hasta ahora han sido más rápidos. Entonces, en lugar de enseñarles a los pacos a dispararle a los ojos a la gente inocente, enséñenles que cuando vayan a detener a un delincuente, ahí sí se pongan la ropa de robocops, lleven cascos y escudos y que no disparen a la cabeza sino a las piernas o a otra partes del cuerpo que no sean mortales, por favor. Porque a los delincuentes comunes, aunque estén robando, si los encuentran con la caja de caudales abierta y en las manos una bolsa con dinero y las joyas de la dueña de casa, no se les puede aplicar la pena de muerte así como así ni asá como asá ni de ninguna otra manera, porque los derechos humanos también rigen para ellos, aunque ustedes no lo crean. Nada de gatillo fácil, por favor.
Acabo de ver unas fotos del presidente Boric arrodillado ante la familia del cabo de carabineros Daniel Palma. ¿Una actitud muy democrática, que demuestra gran sensibilidad? A mí la actitud del presidente me parece otro acto demagógico para contentar a la derecha.
¿Ahora el señor Boric ha despedido el general director de carabineros, a la ministra Tohá o a alguna otra autoridad de gobierno? Que yo sepa, no ¿El presiente se ha arriesgado en algo al visitar y arrodillarse ante la familia del carabinero Daniel Palma? Si, se arriesgó a ensuciarse los pantalones y a quedar con un buen dolor de rodillas.
Esto contrasta muy fuertemente con la actitud del compañero Salvador Allende cuando en la población Lo Hermida murió en forma confusa un poblador. Pues se atrevió a concurrir solo a esa población, a enfrentar a los pobladores enfurecidos y a acompañar el féretro. Y de inmediato despidió al jefe de Investigaciones, Eduardo Paredes, llamado (el Coco) Paredes que era su amigo de siempre y al subjefe comunista, Carlos Toro y nombró jefe a Arsenio (el Cheno) Poupin. Por cierto, el Coco Paredes y el Cheno Poupin fueron asesinados después por la dictadura.
Esta ley maldita, dispone cosas aberrantes y fue aprobada de acuerdo con la derecha. No la que pretende ser Centro Derecha, sino la que siempre ha sido la derecha sin apellidos, la derecha pinochetista.
Por ejemplo, el senador Felipe Kast de Evópoli, sostuvo que “hoy día se mostró la mejor cara de la política, donde todos pusimos de nuestra parte para tener un texto que le diera certeza jurídica a los carabineros, que no tuviesen temor de utilizar sus armas de fuego y que, efectivamente, no van a ser perseguidos injustamente como ha sido hasta hoy”.
Los pacos no van a tener temor de usar sus armas. ¿Qué les parece? A la familia Kast la conocemos, para qué voy a decir más.
Y Juan Antonio Coloma, que es el presidente del Senado, declaró que agradecía a los distintos sectores políticos por sacar adelante la iniciativa, “porque cuesta llegar a acuerdos, hay que tener coraje para llegar a acuerdos”.
La verdad es que para lo que hay que tener coraje es para defender los principios, las ideas y también los programas y las promesas que se le han hecho al pueblo antes de ser elegido. Y agacharse ante la extrema derecha y sus propuestas, se llama cobardía.
¿Y por qué se han apresurado tanto para promulgar esta ley en la que ni siquiera se consultó a los defensores de los derechos humanos ni a ningún interesado?
Obviamente por miedo a la opinión pública, que está completamente obnubilada y cargada a las posiciones de la derecha en esta materia, porque los pinochetistas tienen toda la prensa y los medios de comunicación. Las izquierdas, la de los partidos, la izquierda independiente y menos la del gobierno (si es que hay izquierda en este gobierno) son absolutamente incapaces de hablarle al pueblo y de explicarle bien las cosas. Simplemente se adhieren a las posiciones de la ultra derecha y ¡VAMOS!
¿Para dónde vamos? Pues para atrás, para el pinochetismo puro y duro.
Esta ley va provocar montones de muertos de lado y lado, la delincuencia se va a organizar mejor, va a comprar a más policías y a más autoridades y va a salir bien parada. Porque no son eficientes nuestros policías, no saben cuándo disparar, a quien ni cómo disparar. Los delincuentes, que saben que ahora los pacos los pueden matar y quedar impunes, van a atacar primero y mejor.
No hay que ser adivino para saber eso, porque es lo que ha ocurrido en todos lados.
Y este gobierno asociado con la peor derecha, va a perder todo apoyo popular y va a arrastrar en su desprestigio a quienes lo hayan respaldado.
Margarita Labarca Goddard