Una grave crisis social y política vive el Perú, con miles de ciudadanos en las calles, enfrentados a 11,900 miembros de la Policía Nacional, en el primer día de la denominada “Toma de Lima”, reclamando el cierre del Congreso y la renuncia de la presidenta Dina Boluarte.
La denominada Toma de Lima tuvo frecuentes enfrentamientos entre miembros de la policía y de la población, con palos, huaracas, llegando a agresiones físicas y daños a la propiedad, además de saqueos en algunos puntos de la ciudad, y ataques a infraestructura nacional.
La presidenta Boluarte, en mensaje a la nación señaló que “los actos de violencia, no quedarán impunes. El gobierno actuará en el marco de la ley y prontamente abriendo las carpetas fiscales de aquellos que hacen destrozos. Al pueblo peruano que sí quiere trabajar, y a los que están generando estos actos de protesta, les digo que no me cansaré de llamar al diálogo y de trabajar por el país. Quieren quebrar el estado de derecho. Desde el gobierno les decimos “la situación está controlada y actuaremos con todo el peso a la ley. Estamos individualizando a estos malos ciudadanos que están generando actos de violencia”.
En conferencia de prensa los ministros que acompañaron a la mandataria hicieron un balance de las consecuencias de los enfrentamientos: 22 heridos de la Policía Nacional, 16 civiles heridos, daños materiales a tres aeropuertos (dos intentos a Cusco y Puno, y en Arequipa), un incendio en Lima en el Jr. Carabaya que se encuentra en investigación, el atentado contra periodistas de Canal N y 145 puntos con tránsito restringido. Al final del día también se supo de tres fallecidos el día de ayer y hoy, un fallecido.
Los ministros exhortaron finalmente a dejar la violencia: “unámonos, tengamos un Perú diferente, respetemos la ley” dijeron.
Luego del mensaje a la nación de la presidenta Dina Boluarte y de los ministros, siguieron las movilizaciones en el distrito de Miraflores y el centro de Lima. Cabe señalar que la movilización estuvo compuesta por ciudadanos provenientes del sur y de la misma capital, Lima, sumando miles de manifestantes que llenaron las principales calles y aledañas.
Al cierre de edición, los grupos del sur que pernoctaron la noche anterior en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos hoy se dirigieron a la Universidad Nacional de Ingeniería, donde el rector les abrió las puertas; debido a que la rectora sanmarquina solo les dio albergue hasta las 12 del medio día de hoy.
Mañana se esperan nuevas manifestaciones…