Hace sesenta y siete años, un 1° de Diciembre de 1955, Rosa Parks se negó a ceder su asiento a un pasajero blanco en un autobús de Montgomery, Alabama, desencadenando una ola de protestas que repercutieron en todo Estados Unidos. Su silencioso y valiente acto cambió la visión de los Estados Unidos sobre los negros y redirigió el curso de la historia.
Por entonces, según la ordenanza local, los pasajeros de piel negra estaban obligados a viajar en la parte trasera del transporte público y a ceder los asientos a los pasajeros de piel blanca si los de adelante estaban llenos.
Luego de su acto valiente, Parks fue encarcelada y liberada contra una fianza de 100 dólares. «Lo único que me cansó fue el cansancio de ceder», dijo sobre su decisión de desafiar a la autoridad local.
Pero este no fue un acto aislado, sino un jalón destacado en su lucha por derechos civiles igualitarios para la población negra.
Junto a Raymond – su esposo desde 1933 – trabajaron en los programas de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP). Él era un miembro activo y ella fue secretaria y más tarde líder juvenil de la rama local. En el momento de su detención, se estaba preparando para una importante conferencia de jóvenes.
Tras la detención de Rosa Parks, los negros de Montgomery y simpatizantes diversos organizaron y promovieron un boicot a la línea de autobuses de la ciudad que duró 381 días. El Dr. Martin Luther King, Jr. fue nombrado portavoz del Boicot de Autobuses y enseñó la no violencia a todos los participantes. En consonancia con la protesta de Montgomery, otras tomaron forma en todo el sur y el país. Se desarrollaron múltiples sentadas, comilonas, actividades de natación y acciones similares. Miles de personas valientes se unieron a la «protesta» para exigir la igualdad de derechos para todas las personas.
La Sra. Parks se trasladó a Detroit, Michigan, en 1957. En 1964 se convirtió en diaconisa de la Iglesia Metodista Episcopal Africana (AME).
El congresista John Conyers del primer distrito del Congreso de Michigan contrató a la Sra. Parks, desde 1965 hasta 1988. En febrero de 1987, cofundó el Instituto Rosa y Raymond Parks para el Autodesarrollo con la Sra. Elaine Eason Steele en honor a su marido, Raymond (1903-1977). El propósito fue motivar y dirigir a los jóvenes que no son objeto de otros programas para que alcancen su máximo potencial. Rosa Parks consideraba que la energía de los jóvenes es una verdadera fuerza de cambio. Es uno de sus temas más preciados de las prioridades humanas cuando se dirigió a los jóvenes de todas las edades en las escuelas, colegios y organizaciones nacionales de todo el mundo.
La Sra. Parks recibió más de cuarenta y tres doctorados honoríficos, incluido uno de la Soka University de Tokio (Japón), cientos de placas, certificados, menciones, premios y llaves de muchas ciudades. Entre ellos, la Medalla Spingarn de la NAACP, el Premio a la Justicia Social de la UAW, el Premio a la Paz no violenta Martin Luther King, Jr. Non – Violent Peace Prize y el ROSA PARKS PEACE PRIZE en 1994, en Estocolmo, Suecia, por nombrar algunos. En septiembre de 1996, el cuadragésimo segundo presidente de los Estados Unidos de América, William J. Clinton, concedió a la Sra. Parks la Medalla de la Libertad, el más alto galardón concedido a un ciudadano civil.
Dice la crónica que Rosa Parks partió de este mundo el 24 de octubre de 2005, a la edad de 92 años. Su ejemplo de coraje, dignidad y determinación, sin embargo, la convirtió en un ser inmortal.