Entrevistamos a Edu Barbeira (Stambolsky) para la serie Género y Sexualidades en Hispanoamérica, de Pressenza.com en español
Continuando con nuestra serie Género y Sexualidades en Hispanoamérica, entrevistamos a Edu Barbeira, artista y activista que conocimos en Barcelona hace un par de años. Hace 9 meses se mudó a la ciudad de Santander, capital de Cantabria, España, para crear el Laboratorio de Ideas +, en un entorno ciertamente distinto al de la capital de Cataluña.
P – ¿De dónde viene Stambolsky, tu seudónimo artístico y de activismos?
Stambolsky nace de la represión social acumulada durante años y su nombre no es + que el apellido de casado, tomado como rebelión hacia una sociedad en la que no encaja con lo establecido, ya que no se siente ni hombre ni mujer y no entiende ciertas tradiciones generadas por la sociedad. Es un ser inquieto que durante los años 2012 al 2022 trabajó con la expresión de género dando visibilidad a nociones poco normativas y que actualmente con el proyecto comunitario +, ha creado un laboratorio de identidades alrededor de la idea del café social.
P – ¿Cuánto tiempo viviste en Barcelona, y cuáles fueron tus experiencias de arte y activismo allí? Sé que tuviste una estrecha colaboración con la performista Keops Guerrero y que colaboraron en “Donde nacen las sirenas”, y que el vínculo ha seguido, como se puede ver en las fotografías de la web www.laboratoriodeideas.com
La aventura en Barcelona no sólo duró seis años, sino que continúa en la distancia gracias a colaboraciones con artistas y activistas de la capital catalana. Donde nacen las sirenas es una obra de danza contemporánea que confluye con vídeo creación y textos experimentales para así hablar de la feminidad en el mundo occidental. Gracias a la iniciativa de la bailarina y coreógrafa mexicana Keops Guerrero, juntes creamos una obra visual emotiva e informativa que ha visto escenarios en países como Alemania, Inglaterra, Francia y España.
P – Descríbenos un poco cómo es la vida en la ciudad de Santander, y por qué llegaste allí. ¿Cómo se compara con Barcelona?
Mientras que Barcelona es una ciudad que mira hacia el futuro, generando cultura y diversidad, Santander está al lado opuesto. La capital de Cantabria muestra mayor resistencia a proyectos nuevos, disidentes y alternativos, dejando muy poca viabilidad a la diversidad más allá de lo hegemónico. El Laboratorio es un proyecto que empezó en Barcelona para investigar creativamente sobre las diferentes masculinidades y que en un principio me llevaría a Edimburgo, capital de Escocia donde el traje típico regional masculino es una falda, Kilt.
Al final decidí mudarme a Brighton por estar cerca de Londres y tener mejor clima que Edimburgo, y ahí me di cuenta que los cuerpos y la naturaleza no entienden de masculinidades ni feminidades. Que los cuerpos en sí forman parte de un todo y sería mejor enfocar el proyecto hacia los cuerpos e identidades no normativas como el transgénero y las identidades queer. De ahí nació lo que hoy es un Laboratorio de Identidades, como un espacio seguro donde compartir y expresar el género que debido a la pandemia abrió sus puertas en Santander, donde mi familia reside.
A nueve meses de su apertura se han superado muchos baches y se han creado iniciativas para visibilizar las necesidades de un colectivo menos binario y poco normativo dentro de una ciudad apegada a tradiciones y donde grupos neonazis desafortunadamente resurgen con un apoyo preocupante.
P – A casi 9 meses de su apertura, ¿cómo evalúas la iniciativa del Laboratorio de Identidades?
La gestación perfecta, nueve meses nutriendo un proyecto a base de cariño, poliamor, mucha cultura y sobre todo paciencia en un clima global hostil. Sin financiación institucional ni privada, + es un centro autogestionado que ha creado un café social, un club de arte, cuenta actualmente con cuatro sectores de actividad y continúa creando + opciones para visibilizar tantas realidades como personas en el mundo. Gracias al buen trabajo en equipo realizado y la transparencia de sus actividades, el Laboratorio gana una beca para participar en el congreso europeo de ILGA, la asociación internacional LGBT, que se celebra en Octubre del 2022 en Sofía, Bulgaria. A su vez, + cuenta con el apoyo, al mismo tiempo que se da apoyo, de diferentes grupos medioambientales como Futuro Vegetal, La Bardal y Fridays for Future, creando conciencia sobre la importancia de cuidar el entorno donde vivimos. Por cierto, quienes deseen estar al día con nuestras actividades, pueden seguirnos en Instagram en @laboratoriodeidentidades
P – ¿Cómo se financia el Laboratorio?
El Lab, como cariñosamente se conoce, es un centro autogestionado donde el café social es la fuente de ingresos principal. Gracias a las consumiciones de visitantes y el uso que le dan grupos creativos como La Espiral Contemporánea de Cristina Samaniego, el espacio mantiene su actividad. Actualmente se está trabajando en crear cuotas de socies, dando membresías gratuitas a menores de 16 años. A su vez, desde el Lab, las puertas están abiertas a colaboraciones y donaciones, partners y otras formas asociativas para su vigencia en el futuro y con miras a abrir otros Laboratorios en diferentes ciudades. Desde aquí se anima a visitar la web www.laboratoriodeidentidades.com y hacerse socie de esta aventura social.
P – Veo que es un espacio multifuncional abierto para el desarrollo de herramientas y un ambiente amable para el intercambio, el disfrute de la sexualidad y la autoaceptación entre personas diversas para así ir generando un diálogo con el resto de la sociedad que lleve a las transformaciones culturales necesarias en los temas de género y sexualidad. ¿Había ya en Santander un espacio semejante al Laboratorio?
La necesidad de abrir un café social en una ciudad como Santander nace de la carencia de proyectos comunitarios y la necesidad por apoyar a un colectivo que no se siente identificade con la idea hegemónica de las siglas LGBT. Con conceptos algo anclados en décadas pasadas por parte de las instituciones y colectivos, generaciones + jóvenes buscan espacios para compartir donde no tengan que dar explicaciones ni defender cómo expresan su deseo sexual o su identidad, ¡o ambas! Desde un cuidado al medio ambiente, entorno natural de los seres humanos, el Laboratorio se crea alrededor de un café vegano e invita a sus usuaries a hacer el espacio suyo y compartirlo como lo sienten, generando así un sentimiento de pertenencia dentro de la sociedad. La naturaleza no discrimina, el ser humano sí, por eso es importante crear una relación con nuestro cuerpo, nutrirlo y compartirlo desde nuestra propia realidad.
P – ¿Cómo es la relación con los feminismos, entendiendo que no hay un solo feminismo, sino varios, desde los más extremos hasta los más abiertos y dialogantes?
Ahora mismo es importante reconocer la existencia de otros feminismos y las diferentes realidades y formas de ser mujer, como nos hace ver el ecofeminismo, el transfeminismo y el feminismo decolonial. Sin embargo, Santander se centra en un feminismo omitiendo otras realidades sociales, como Mujeres con pene, Hombres con vagina, personas racialmente diversas, convirtiéndolos en colectivos que el feminismo en Santander no reconoce y no incluye en su activismo por una sociedad equilibrada. La escasez de población joven hace el proceso de adaptación a otras realidades feministas un trabajo lento y desde el Laboratorio se visibilizan discursos alternativos para una mayor apertura de conciencia hacia las diferentes realidades que dan forma a nuestra sociedad.
P – ¿Quieres agregar algunas palabras finales?
Anthony D. Williams dijo: «Estamos aquí para sanar, no para herir. Estamos aquí para amar, no para odiar. Estamos aquí para crear, no para destruir». Desde el Laboratorio de Identidades se visibiliza un afecto respetuoso por la realidad que cada persona crea. Debido a la constante suma de siglas que se añaden al colectivo LGBTQIA2+ para abarcar a todas las identidades posibles, nace algo llamado SOGIE y que ya se está empezando a utilizar como expresión para dar visibilidad al conjunto de personas que forman nuestra sociedad desde un punto de vista no binario y lejos de la normatividad que las siglas conllevan. Sexual Orientation, Gender Identity and Expression (SOGIE) abarca lo que en un principio la Teoría Queer venía estudiando, una igualdad social donde la expresión única de cada persona es valorada en el conjunto de la sociedad. Hay muchas personas que no se identifican con siglas, debido a que siguen alienando, segregando y más recientemente lucrando económicamente, y tan sólo tienen la necesidad de expresar su deseo sexual y de identidad, tal y como lo sienten. Desde +, Laboratorio de identidades, generamos el espacio para expresar humanidad, a través del arte, el bienestar y el medio ambiente. Visita la web, Instagram, incluso el espacio físico en Santa Lucía 12 si estás por Santander, y sé parte de la aventura, porque el camino lo trazamos juntes.
Otras entrevistas de la serie «Género y Sexualidades en Hispanoamérica»:
Keops Guerrero, activista y artista trans (Barcelona, España)
Franco Fuica, dirigente de la OTD, organización por los defechos de las personas trans (Chile)
Paulina Bravo, abogada lesbiana y activista por los derechos de las personas ciegas
Marco Ruiz, dirigente histórico del MOVILH y el MUMS (Chile)
Felipink, cantante y performista gay (Chile)
Diego Ramos, activista por la inclusión de las personas con discapacidad (Chile)
Danilo Urbina, Escuela Transdisciplinaria de Sexualidad (Chile)
*** Si conoces a un(a) activista del mundo hispanoamericano cuyo trabajo merezca conocerse, escribeme a danmetor@gmail.com
