27 de septiembre 2022, El Espectador
Más allá de partidos políticos, de la fe o el agnosticismo, del valor o el miedo que llevemos a cuestas y de las obsesiones por encerrarnos entre fronteras visibles e invisibles, algo en lo que casi todos estamos de acuerdo es en que esto de andar matándonos por ahí, porque no y porque sí, no puede instalarse como una costumbre, como un paisaje fúnebre.
Nos han dicho en manifestaciones y decretos, en parroquias, juzgados y cementerios, que la vida es sagrada, que la vida es el valor supremo y con la vida no se juega a matar.
En Colombia somos maravillosos, trabajadores, resilientes y creativos, pero nos cuesta romper ataduras con nuestras guerras individuales y colectivas, y admitir que son un fracaso: el Puerto Añicos, al que nadie –en su relativo sano juicio– debería querer llegar.
El próximo 2 de octubre, día internacional de la no violencia, llevaremos en nuestras telas y en nuestras voces, en los muros o en las manos, en los trinos y en las palabras, en nuestras casas, en diez canoas o en cien parques, esta consigna: #NoMatarás, Colombia unida, por la vida y por la paz. El movimiento Defendamos La Paz (nacional e internacional) y distintas plataformas que trabajamos por la no violencia y la protección de los derechos humanos, les diremos a quienes se obstinan en repartir intimidación, plomo y dolor, que la vida se respeta.
#NoMatarás será una jornada de las comunidades que se niegan a endosarle al miedo, su existencia; una jornada de reflexión para mirarnos a nosotros mismos y comprender que a la muerte violenta hay que ponerle punto final; exigirles a quienes ejercen el oficio de la violencia, que paren su carrera mortal; que es infame, es irracional, pasarse la propia vida rompiendo el cuerpo y los sueños de los demás.
#NoMatarás, a nadie. No tortures, no desaparezcas, no ejerzas la cobardía de las balas; no vistas de luto los pueblos ni de sangre y petróleo los ríos; no dejes más padres huérfanos de hijos, ni más hijos huérfanos de padres.
#NoMatarás. Ni en Ituango ni en Montañitas, ni en Mesetas ni en Mutatá, ni en San José ni el Tambo, ni en Leticia ni en Saravena. #NoMatarás. No sumes ni uno ni una más a la lista de los 128 líderes sociales y defensores de derechos humanos asesinados del 1º de enero al 11 de septiembre del 2022. No sumes ni uno ni una más a los 34 firmantes de paz asesinados en 36 semanas.
#NoMatarás por cobrar una venganza, por robar un peso o una parcela, o porque no sabes disentir. #NoMatarás soldados ni exguerrilleros, manifestantes ni policías; #NoMatarás al que padece la inequidad ni al que se lucra de ella. #NoMatarás por la ruta de la coca, por la manotada de esmeraldas o las coladeras de oro y arena. #NoMatarás la infancia, la confianza, el presente y el futuro. #NoMatarás. Punto. Suficiente dolor con las catástrofes inevitables, las enfermedades letales y los abuelos que se apagan.
Si queremos vivir completo, sentir los instantes y las sílabas y lo que significa tener la posibilidad de recibir un nuevo día, necesitamos que la violencia deje de asfixiarnos.
Este 2 de octubre del 2022 rompa el hechizo del 2 de octubre del 2016 y defienda la vida. Vístase de blanco o de colores, de algodón o lentejuelas, toque una campana o un tambor, invéntese una canción o una oración y dígale a Colombia y al mundo que, a usted, la vida le importa. Que no somos un país condenado a la violencia; que en medio de nuestros claroscuros cada muerto cuenta y cuenta una historia, y por él, por ella y por todos y porque es un deber decirlo a los cuatro vientos: #NoMatarás.