POEMA
Volver a esa semilla que brota,
que se tiñe de colores vivos,
que se adorna de hojas tiernas
y donde las orugas se convierten en mariposas.
Volver a esa tierra santa,
húmeda con olores que resaltan,
con suavidad que desvanece mi cuerpo
y con hojas caídas que abrazan mis pasos.
Volver a ese cielo,
donde puedo mirar al océano,
jugar con las nubes,
imaginar atardeceres
y perseguir la manada de pájaros.
Volver al maíz,
al comal que desprende el sabor a tortilla,
café tostado
y chiles asados.
Volver a la plazuela,
al repique de campanas,
al esquite recién preparado
y al pasar de las parejas enamoradas.
Volver con el pensamiento
Volver aunque esté durmiendo
Volver sin retorno
Volver a vivir.