Unos 274 millones de personas en todo el mundo están necesitando ayuda humanitaria en más de 60 países, recordaron agencias del sistema de Naciones Unidas con motivo de conmemorarse este viernes 19 el Día Mundial de la Asistencia Humanitaria.
Esa cifra, superior en casi 40 millones a las personas urgidas de asistencia en 2021, es la mayor en la historia del sistema de ayuda humanitaria, según el Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa) y la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de la ONU (Ocha).
Destacan que incluye 100 millones de personas que viven en desplazamiento forzado (42 % niños) y 345 millones que enfrentan inseguridad alimentaria aguda.
El Unfpa atribuye esa elevada necesidad a “crisis múltiples e interseccionales: conflictos violentos, muchos de ellos con varios años de duración; intensificación de las sequías, clima extremo y epidemias resultantes del cambio climático, que avanza sin cesar; y alteraciones políticas y económicas tras dos años de covid-19”.
Solo por el cambio climático, hasta 216 millones de personas deberían desplazarse dentro de sus propios países hacia el año 2050, según agencias de la ONU.
Las crisis afectan de manera desproporcionada a mujeres y niñas, ya que generan caos y entorpecen el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva esenciales, con consecuencias devastadoras, subrayó el reporte del Fondo.
Las mujeres y niñas enfrentan elevados riesgos de violencia de género, infección por el VIH, embarazos no intencionales y mortalidad materna.
Dos tercios de las muertes durante el embarazo y el parto tienen lugar durante emergencias humanitarias o en contextos frágiles.
Por otra parte, “con demasiada frecuencia, las respuestas humanitarias ignoran necesidades vitales como la asistencia prenatal, asistencia cualificada en el parto, anticoncepción y asistencia a las supervivientes de violencia de género”.
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria se celebra cada 19 de agosto en memoria de los 22 trabajadores humanitarios que perdieron la vida durante el ataque terrorista de 2003 contra la sede de las Naciones Unidas en Bagdad.
En 2020 fueron asesinados 117 trabajadores humanitarios, de los cuales 108 trabajaban en su propio país. En 2021 murieron 140, y además 203 fueron heridos y 117 secuestrados, y en lo que va de 2022 han fallecido 44 en distintos ataques, según Jens Laerke, portavoz de la Ocha.
Este año, la conmemoración tiene como objetivo inspirar una gratitud global por los esfuerzos de la comunidad humanitaria, que todos los días trabaja para abordar los desafíos de atender a los millones de personas que necesitan asistencia.
El Unfpa elogia que la mayoría de las personas en primera línea de las crisis humanitarias provienen de comunidades afectadas, congregadas por autoridades locales y nacionales, organizaciones de la sociedad civil, grupos religiosos y otros que ofrecen tiempo y capacidades para ayudar a sus vecinos.
Las agencias de las Naciones Unidas han planteado requerimientos que suman 41 000 millones de dólares para alcanzar con asistencia humanitaria este año a 183 millones de personas en 63 países.
El Unfpa, en particular, espera llegar a 54,5 millones de mujeres, niñas y personas jóvenes afectadas por crisis en 61 países, con atención, información y suministros vitales para la salud sexual y reproductiva, y con servicios centrados en las supervivientes para prevenir la violencia de género y responder ante ella.