Marruecos ha sacado pecho sobre la actuación de sus fuerzas de seguridad el pasado viernes cuando unas 2000 personas migrantes intentaron saltar la valla de Melilla. Un intento de salto que hasta el momento, según cifras oficiales ofrecidas por Marruecos, se ha cobrado la vida de 23 personas y que las ONG aumentan la cifra hasta 47. Nunca en la historia de los intentos de entradas ilegales a través de las vallas de Ceuta y Melilla, se habían vivido episodios tan violentos como el que nos mostraron las imágenes grabadas y compartidas en las redes sociales durante el fin de semana por las oenegés que trabajan sobre el terreno al otro lado de las verjas españolas. Unas imágenes que mostraban la dureza de lo que allí había ocurrido que dejaban ver decenas de migrantes hacinados heridos y agolpados sin asistencia médica.
De la brutalidad con la que se emplearon los agentes desplegados una vez que tras los enfrentamientos entre policías y migrantes fueron controlados, los responsables de la seguridad marroquí no responden. Las imágenes de jóvenes africanos golpeados en el suelo y de la pasividad para atender a las decenas de heridos no hizo más que aumentar el número de muertos, según han denunciado las organizaciones de derechos humanos.
Hoy mismo el ministerio del interior marroquí ha difundido los vídeos grabados por los agentes durante la intervención mostrando solo a los migrantes como los responsables de los disturbios. También se puede ver cómo por el peso que soportaba el tramo de la valla cercano al barrio chino, está cede y al menos medio centenar de personas que estaban encaramadas caen al lado marroquí.
Para el responsable de migración y vigilancia fronteriza del Ministerio del Interior de Marruecos, Khalid Zerouali, la política migratoria de Marruecos está dirigida hacia una «lógica humanista» lamentablemente pervertida por las acciones criminales de las redes de tráfico. Para Zerouali «más allá de la movilidad, integra un paradigma cardinal centrado en el ser humano en la sacralidad de sus derechos fundamentales», Estas declaraciones las realizó el pasado domingo en el seno de una reunión con altos funcionarios del Ministerio de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y marroquíes. residentes en el extranjero, los del Interior y los embajadores y representantes del cuerpo diplomático africano acreditados en Marruecos.
En el ámbito de la Estrategia Nacional para la Inmigración y el Asilo (SNIA), iniciada en 2013 “nuestro país ha establecido este enfoque solidario e inclusivo inscrito en la continuidad de la vocación eminentemente africana desde Marruecos”, dijo. En ese sentido, el director de las fronteras del reino alauita lamentó que “esta dimensión noble y virtuosa de la migración” sea “pervertida por el empuje delictivo de las redes de trata, que explotan la vulnerabilidad de las víctimas y las someten a peligrosas y mortíferas aventuras”. Khalid Zerouali ha señalado que estas redes “utilizan estratagemas muy violentas, en particular durante los ataques planificados de forma militar, con asaltantes con perfiles de milicianos y ex soldados de países desestabilizados por la guerra y los conflictos”.
También se ha pronunciado sobre lo ocurrido el pasado viernes en la valla fronteriza entre Nador y Melilla tachándolo como «una auténtica tragedia que lamentamos». Zerouali reveló que las autoridades marroquíes están librando una lucha sin cuartel contra estas redes de tráfico con más de 1.300 redes desmanteladas en los últimos cinco años ( 256 en 2021 y 100 hasta mayo de 2022) y precisó que se han repelido más de 145 asaltos en torno a los dos ciudades españolas desde 2016 (50 en 2021 y 12 hasta mayo de 2022), asegurando que muchos de los agentes de las fuerzas de seguridad, que siempre han actuado con profesionalidad y en pleno cumplimiento de las leyes y reglamentos, resultan heridos durante estos «asaltos».
En esa misma reunión también compartió datos sobre las actuaciones contra la inmigración ilegal acometidas por las fuerzas de seguridad marroquíes, confirmando que se han frustrado más de 360.000 intentos de pase de inmigrantes desde 2017 (63.000 en 2021 y 26.000 hasta mayo de 2022).
Khalid Zerouali también señaló que el entorno regional, el contexto post-Covid, la guerra en Ucrania y la crisis alimentaria que se avecina impulsan el desafío migratorio y requieren más que nunca acciones concretas en términos de solidaridad activa y apoyo plural.
Para el funcionario, “los países del Norte deben dar prioridad y abordar sobre un prisma equilibrado en su enfoque que no debe estar imbuido solo en lo que a seguridad se refiere seguridad, sino basado en soluciones estructurales en torno al desarrollo sostenible de los países de origen y el fomento de la movilidad legal entre las dos orillas”.
Por otra parte, fuentes marroquíes señalan a Argel como precursor de “la avalancha” en Nador para desestabilizar el acuerdo hispano-marroquí en materia de lucha contra la inmigración ilegal. La misma fuente señala que la relajación en el área fronteriza entre los dos países vecinos que mantiene un perímetro de más de 1700 kilómetros, ha causado “efecto llamada” y han hecho que las mafias desvíen la ruta, que normalmente tenía como destino el Mediterráneo Central, hacia el norte. Ciudadanos de Sudán y Chad habrían escogido intentar el salto a través de las vallas de Ceuta y Melilla.
Argelia condena contundentemente lo ocurrido en Melilla
Ammar Blani, enviado especial argelino para el Sáhara Occidental y el Magreb, calificó en declaraciones a un medio del país magrebí, como de “asesinato” la muerte de un gran número de migrantes africanos en Marruecos y de «masacre horrible» que puso de manifiesto “una verdadera violación de los derechos humanos de un país (Marruecos) que explota la inmigración irregular para el chantaje político”. “De hecho, las imágenes de esta masacre son horribles. Refleja una brutalidad excesiva y el uso gratuito de la fuerza que, en estas circunstancias, equivale a ejecuciones reales”.
Agregó que “estos trágicos hechos ponen en evidencia la violación sistemática de los derechos humanos por parte de un país que optó, por un lado, por explotar los migrantes con fines de chantaje político, y por otro lado, jugó el papel de gendarme y agente de la Unión Europea en la protección de sus fronteras exteriores meridionales”.
Blani afea a Marruecos “que dice ser un campeón en la lucha contra la inmigración dentro de la Unión Africana e incluso alberga en su territorio la sede del Observatorio Africano de la Migración. Según él, “estamos muy lejos del papel ideal asumido durante la Cumbre de Marrakech sobre el pacto mundial para una migración segura, ordenada y regular”.
Argelia dejó clara su postura durante la conferencia sobre el pacto mundial de migraciones celebrada en Marrakech en 2018. Su representante Hassan Kacimi, director de Migraciones en el Ministerio del Interior Argelino afirmó que “corresponde a cada país “definir la política pública migratoria” añadiendo que “Argelia no hará́ ninguna concesión a la hora de securitizar sus fronteras”
El mismo funcionario reclama una investigación internacional e independiente que sea transparente sobre lo que considera como «unos hechos muy graves» que han costado la vida a personas humanas.
La Unión Africana que a través de su presidente, Moussa Faki, ha condenando la “masacre de Melilla” y el trato violento a los inmigrantes africanos en la frontera marroquí-española durante el intento masivo de entrada en la ciudad española de Melilla, y exigió una investigación para esta tragedia. “Pido una investigación inmediata de este caso y recuerdo a todos los países sus obligaciones en virtud del derecho internacional de tratar a todos los migrantes con dignidad y anteponer su seguridad y sus derechos humanos, limitando al mismo tiempo cualquier uso excesivo de la fuerza”
“Expreso mi profundo sentimiento y preocupación por el trato violento y degradante de los migrantes africanos que buscan cruzar la frontera internacional entre Marruecos y España”, escribió Moussa Faki en Twitter.