Las fuerzas armadas israelíes en los territorios ocupados de Cisjordania mataron a disparos a la veterana periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh mientras cubría una incursión israelí en el campamento de refugiados de la ciudad de Jenin en la mañana del miércoles. La periodista trabajaba para la cadena Al Jazeera. La noticia fue divulgada por Al Jazeera y el Ministerio de Salud palestino. Un video publicado por Al Jazeera muestra los momentos después de que Abu Akleh recibe un disparo en la cabeza.
Un portavoz del Ejército israelí le dijo a una estación de radio militar que Abu Akleh probablemente murió por disparos provenientes de personas palestinas, aunque no ofreció ninguna evidencia al respecto. El jefe de la oficina de Al Jazeera en Jerusalén afirmó que Abu Akleh fue blanco de un “disparo directo” de un francotirador israelí. Un segundo periodista palestino, Ali al-Samudi, fue hospitalizado en condición estable después de recibir un disparo en la espalda. Desde un hospital en Jenin, al-Samudi dijo que él fue uno de los cuatro periodistas que fueron atacados por francotiradores israelíes.
Ali al-Samudi: “La ocupación [israelí] es asesina y criminal. Nos dispararon sin motivo alguno. Nosotros éramos un grupo de periodistas que estábamos allí con uniformes que nos identificaban como trabajadores de los medios y con la palabra ‘prensa’ escrita en letras grandes, tan grandes como el mundo entero. Nuestra condición de periodistas era obvia”.
La cadena Al Jazeera dijo en un comunicado que responsabiliza al Gobierno y a las fuerzas armadas israelíes por el asesinato de la periodista, al que calificó como un “crimen atroz que solo pretende evitar que los medios de comunicación cumplan con su deber”. El embajador de Estados Unidos en Israel, Tom Nides, pidió que se iniciara una investigación al respecto y publicó en Twitter que estaba “muy triste por la muerte de la periodista estadounidense y palestina Shireen Abu Akleh”.