El Congreso español aprobó una legislación histórica que codificaría en la ley española la definición de consentimiento como una expresión explícita de la voluntad de una persona, liberando así a las víctimas de agresión sexual de la carga de tener que probar que se usó violencia o intimidación contra ellas.
La medida, conocida como “ley del solo sí es sí”, hace que el consentimiento sea un determinante clave en los casos de agresión sexual y enfatiza que el silencio de una persona no equivale a consentimiento.
La iniciativa fue impulsada por la ministra de Igualdad de España, Irene Montero.
Irene Montero: “Hoy el movimiento feminista vuelve a hacer historia. Se lo debíamos a cada una de las víctimas. Nos lo debíamos a nosotras mismas. Y seguramente sea uno de los derechos más importantes que podamos dejarles a nuestras hijas, en el presente y en el futuro. Solo sí es sí. ¡Que viva la lucha de las mujeres! Muchísimas gracias”.
