Y fueron desposeídos
los antiguos pobladores.
¿Quién inventó “propiedades”?
¿Señores “conquistadores”?
El título escogido para este libro es más que una declaración, una reafirmación y un testimonio de la sobrevivencia del Pueblo Nación Charrúa.
Editado por la Universidad Autónoma de Entre Ríos, fue presentado en pasado 28 de octubre en esa ciudad. Bernardita Zalisñak y Ukaivbera Gladys Do Nascimento, ambas coordinadoras del Programa Interculturalidad y Pueblos Originarios de la UADER, son también las compiladoras de la obra.
En la introducción se lee:
“…a partir de sentires, reflexiones, denuncias y proclamas, se manifiesta la voz de un pueblo que ha sido perseguido, masacrado, pero que sigue vivo y dispuesto a contribuir en la revisión y reversión de mitos impuestos. Entre ellos, el de la única nación, sin indios, eurocéntrica, blanca, moderna, patriarcal, extractivista y agrocapitalista, implantada violentamente como superior y por sobre las inmensas cosmovisiones milenarias preexistentes en los territorios ancestrales.”
Por su parte Ukaivberá Gladys Do Nascimento, autora de algunos de los textos compilados, escribió también la expresiva presentación que sigue.
A modo de presentación
Las palabras vibran en quien las dice y en quien las escucha, y eso intentaremos lograr desde este compilado, mediante las palabras dichas por nuestros inchalá, humanos, charrúa que hoy sienten, vibran y comparten para no olvidar la ancestralidad de estos territorios donde jamás dejamos de estar.
Como decía nuestra anaxi, Rosita Alvariño: “nosotros no decimos palabras, son las palabras que dicen de nosotros”, por eso debemos ser cuidadosos cuando las pronunciamos, pues ellas delatan más el sentir que el pensar.
Eso lo vamos reaprendiendo en nuestros compartires, en los círculos, en el trato cotidiano, en las ceremonias, en renombrar, en nuestros nombres, en los cantos inspirados. Así es nuestra forma, hoy tomamos otras, como la escritura de un idioma impuesto que hoy se vuelve elemento inspirador para ser compartido.
Las lenguas de nuestro pueblo y en general de los originarios, no se pueden aprender repitiendo palabras y su traducción en español, no es la forma, dado que aprender una de nuestras lenguas implica muchos significados profundos, y numerosas posibilidades relacionadas al contexto, a lo subjetivo, al territorio, a los ciclos en interconexión con el todo. Y, principalmente, con el sentir profundo del que la emite. Por ello, en esta ocasión traemos las palabras dichas, en un lenguaje que tomamos prestado, pero no por ello menos cargado de profundidad y belleza.
En este caso, nuestro Pueblo-Nación se va reencontrando por lo tanto también con nuestras tem ejcancajt (palabras almas). Jalana, am andu bascuade to cjuinem (nosotros nos estamos o vamos levantándonos celebrando en comunidad).
Habiéndose agotado de inmediato la primera edición del libro, la editorial puso a disposición la versión digital que puede descargarse en este enlace.