Declarado el kilometro O mundial de los gorilas, por el Comité Internacional del Corredor Biológico Mundial, las reservas naturales existentes entre los parques nacionales de Maïko y Virunga de la República Democrática del Congo.
Proyecto Gran Simio (PGS) ha firmado un Acuerdo de colaboración con UGADEC (Unión de Asociaciones de Conservación de Gorilas para el desarrollo comunitario de la República Democrática del Congo) cuya sede se encuentra en la ciudad de Goma del mencionado país.
La importancia de este acuerdo es apoyar a UGADEC en el trabajo que están realizando sobre el terreno, en una serie de reservas naturales que forman un corredor biológico entre los Parques Nacionales de Maïko y Virunga en la República Democrática del Congo (RDC) denominadas Maïko – Usula – Kisimba Ikobo y Tayna, en las cuales realizan patrullajes sin armas, información y educación en los pueblos del corredor, monitoreo de gorilas y chimpancés, intervención biológica de conservación, investigación científica y desarrollo de áreas de conservación.
Para PGS, es de suma importancia la implicación directa de la propia sociedad civil de la RDC en la conservación de sus recursos naturales, de sus selvas tropicales indispensables en la lucha contra el cambio climático y la protección de las especies de animales vulnerables o en crítico peligro de extinción como los gorilas de Grauer, chimpancés orientales, más de 14 especies de primates, el elefante pigmeo o también llamado el elefante del bosque, okapis, tres especies de pangolies y leopardos, así como muchos ecosistemas forestales y especies de plantas autóctonas, humedales ribereños y acuáticos. Toda una biodiversidad tropical de importancia para la conservación mundial.
Para Alain Mitondo, director ejecutivo de UGADEC, el acuerdo con Proyecto Gran Simio es “de vital importancia para el desarrollo de nuestro trabajo y la protección de los ecosistemas forestales y protección de especies mediante la educación en las zonas donde trabajamos”.
La región que se intenta proteger es conocida como un área de pobreza significativa, donde casi todos sus los habitantes dependen de la agricultura y la caza de subsistencia y de la recolección de productos del bosque. Esta situación de pobreza se ha visto agravada por el conflicto regional en curso que resulta en un deterioro de la situación de la vida silvestre, y las comunidades locales de la región se ven obligadas a caza furtiva de grandes simios y otras especies protegidas para la subsistencia y la generación de ingresos. Los pangolines se encuentran en grave peligro de extinción como los grandes simios y se debe a la sobreexplotación tanto de la caza furtiva para el consumo de los animales como de las partes de su cuerpo (por ejemplo, escamas) para el tráfico. Además, el método de roza y quema se utiliza principalmente para las actividades agrícolas que se llevan a cabo en la región. La minería (de oro, coltán o estaño) también se explota en varias zonas de la región. La expansión de estas actividades representa una amenaza directa a las áreas de conservación comunitaria forestal. Es por ello que UGADEC viene emprendiendo en el área acciones de conservación que se integran con el desarrollo con gran involucramiento de las comunidades locales para frenar la deforestación y degradación de estos bosques, y el declive de estas especies de importancia mundial, para que no se extingan dentro de las próximas décadas.
“UGADEC utiliza un enfoque orientado a las especies: la conservación de los gorilas orientales de tierras bajas (gorilla beringei graueri), la especie endémica de los bosques del este de la República Democrática del Congo, con especial atención a algunas otras especies amenazadas protegidas por la ley congoleña, incluido el chimpancé oriental. (pan troglodytes) y el pangolín. Esta gran labor está siendo desempeñada de manera altruista y es por ello que desde Proyecto Gran Simio les daremos todo el apoyo posible e intentaremos que el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, se vuelque también en el apoyo por la defensa de este corredor biológico de inmensa riqueza biológica. Tenemos que tener en cuenta que la conservación de estos sistemas tropicales, beneficia a toda la humanidad por lo que invertir recursos en su protección es invertir en esperanza de vida y combatir los efectos del cambio climático que tiene en la deforestación, una de sus principales causas mortales contra la biodiversidad de la Tierra”, ha declarado Pedro Pozas Terrados, Director Ejecutivo del Proyecto Gran Simio y Vicepresidente del Comité Internacional del Corredor Biológico Muncial.
Así mismo, la Directiva del Comité Internacional del Corredor Biológico Mundial, ha nombrado las zonas que unen los citados Parques nacionales y en las que se encuentra trabajando para su conservación AGADEC (Maïko – Usula – Kisimba Ikobo y Tayna), cómo el KILÓMETRO 0 MUNDIAL DE LA PROTECCIÓN DE LOS GORILAS.
“Es un verdadero honor sumar a UGADEC como miembro de nuestro Comité Internacional. Su determinación y trabajo en defensa de la biodiversidad durante largo tiempo en circunstancias adversas, es un ejemplo a seguir y por supuesto a apoyar. Por eso adquirimos una gran responsabilidad junto a ellos a la hora de incluir estas reservas naturales de alto valor ecológico como parte del Corredor Biológico Mundial, con una aclaración, tan importantes como son los Parques Nacionales de Maïko y Virunga como las reservas naturales de Maïko – Usula – Kisimba Ikobo y Tayna que las unen. Sin ellas muchas de las especies de fauna y flora no podrían migrar, sobrevivir o reproducirse de forma natural por culpa de la acción humana, deforestación, caza furtiva, incendios, agricultura o minería. La labor que desarrollan miembros del comité internacional como Proyecto Gran Simio en varios continentes son totalmente imprescindibles”, ha declarado el Presidente del Comité Internacional del Corredor Biológico Mundial, Jorge Extramiana Salillas.
Para Pozas, la importancia de este nombramiento al pasillo verde donde trabaja UGADEC, es considerable ya que de esta forma se hace visible su lucha y defensa por la vida y puede incentivar a otras Comunidades locales para seguir el ejemplo en esta lucha contra reloj en la conservación de la biodiversidad de nuestro planeta y la protección de los seres vivos tanto humanos como no humanos que habitan en los grandes pulmones de nuestro planeta.