POEMA

 

 

 

 

Cuidar el alma con hojitas de albahaca, 

llevarla en el pecho como escudo de hierro,

sentir su poder como hogar que te cuida,

dejar que el olor te envuelva serena.

 

Hojita de albahaca que cubre mi cuerpa,

vas recogiendo energías que te queman,

ennegrecida te vuelves al hogar,

como carbón que pasa por fuego.

 

Mi alma contenta se posa,

sabiendo que tu muerte anunciada,

devuelve vida y sanación a mi ser,

Porque tú, morirás hoy seca, 

pero liberarás de energías sedientas a mi ser.

 

Al llegar mi a mi casa,

retiro tu cuerpo seco de mi pecho,

le agradezco por desviarme miradas,

por romper con malos deseos,

por bloquear malos pensamientos,

por librar a mi alma de secarse por el odio y la envidia.

 

Gracias hojita de albahaca

Por morir para darme vida,

Por perder tu aroma para perfumar mi sombra,

Por despojarte de tu color verde,

para reverdecer las raíces de mi cuerpa.

 

Gracias plantita de albahaca,

porque con una sola de tus hijas hojas,

das vida al vulnerable,

al que se quema por la deshumanización,

al que acechan por la dominación.

 

Hoy se acaba el día,

pero mañana,

anunciar tu muerte,

es lo que me permitirá salvar la mía.