La Asamblea Nacional reformó el Código del Ambiente, reconociendo de geoparques o espacios dedicados a la conservación animal; así como el reconocimiento de los animales como seres sintientes. También se incorporaron varias prohibiciones relativas al maltrato animal, principalmente de animales de compañía. Entre estas prohibiciones están la comercialización y reproducción de especies con fines comerciales, así como la introducción al país de especies exóticas, y la pelea de animales.
Estas reformas al Código del Ambiente incluían una transitoria referida a una moratoria inicialmente temporal, para la comercialización de pesca incidental de partes o derivados de toda clase de rayas, tiburones y especies protegidas, amenazadas y en peligro de extinción. También buscaba que se incluyan artes de pesca correctas, eliminando el uso del palangre u otras estrategias de pesca, que amenazan especies, y propician la pesca incidental. Sin embargo, ante la falta de acuerdos sobre el tema, la votación se realizó en dos partes: por un lado, el texto final de reformas al Código del Ambiente, y por otro, la transitoria cuarta.
El Asambleísta proponente de la reforma, Washington Varela, presidente de la Comisión de Biodiversidad, amplió la moratoria para un año; propuesta que tampoco tuvo acogida. Finalmente, las reformas al Código del Ambiente fueron aprobadas con 117 votos de los 137 asambleístas presentes, y la transitoria en cambio, alcanzó 127 abstenciones.
Posterior a la votación, el asambleísta por la Izquierda Democrática, Xavier Santos, señaló que la prohibición de pesca a especies protegidas ya está contenida en la actual Ley de Desarrollo Pesquero, en los artículos que van del 150 al 153. Así mismo, el artículo 153 ordena a la Autoridad Ambiental Nacional realizar un listado de especies protegidas. Sin embargo, según este asambleísta, la ley aún no cuenta con un reglamento que norme dichos artículos, a pesar de que fue aprobada en octubre de 2020 y este reglamento debía realizarse en 6 meses. De allí que increpó al Ministerio de Ambiente para saber el cumplimiento de esta disposición: “Queremos que el ente rector nos diga cuántas sanciones se ha hecho a la flota atunera y palangrera que captura el tiburón indiscriminadamente”.
Grupos ambientalistas, principalmente de Galápagos esperaban que con esta moratoria se reduzca la pesca incidental en la Reserva Marina, que pone en peligro a especies endémicas y en peligro de extinción; por lo cual rechazan la votación realizada por la Asamblea. Ecuador ocupa el tercer lugar a nivel mundial en la exportación de aletas de tiburón.
Por Verónica Calvopiña