POEMA
Aquella mañana,
mientras me miraba sobre el espejo
Había cosas que deseaba disimular
Figuras que anhelaba borrar
Características que nublaban mi mirada.
¿Qué aspectos me molestan?
¿Por qué me veo y no quiero verme?
¿Cuál es la imagen que añoro mirar?
¿Cuánto disgusto y deseo perduran?
Tan curiosa fue la mañana,
que al salir de mi jaula,
y al interactuar con otra corporalidad
Sentí incomodidad.
Escuchaba sus miedos
y me producían incertidumbre.
Leía sus inseguridades
y abrazaba mi corazón.
Reconocía sus estigmas
y me miraba riendo con ella.
No es posible que te mire y me moleste,
No entiendo porque te leo
y me siento incómoda.
¿Por qué miro tus defectos,
y tú los ves como cualidad?
La mujer sabia,
viéndome con lagunas en la mente,
me llama,
se acerca a mi oído,
y me dice.
Somos espejos,
lo que nos molesta del otro,
nosotros lo tenemos
Los seres humanos, somos espejos.
No es que te moleste su cuerpx,
no te gusta eso de ti.
No es que te incomode su inseguridad,
tú misma pisas pantanoso.