POEMA
Es el Árbol de las
emanaciones,
de las diez sefirot
de la divinidad.
Los principios
transtemporales,
de nuestra
encantada heredad.
Es la Corona,
la primera emanación,
esencia de
la libertad,
la salud,
el amor y
la paz.
Le sigue
la Sabiduría,
figura de
femenina presencia,
es el resplandor de
la luz eterna,
a través de la conciencia.
Se les une
el Entendimiento,
idea que se
concreta,
en el marco de
lo posible;
torrente de energías
de aguas diáfanas
en pos del futuro.
Surge la Misericordia,
exhalando amabilidad,
trama de
extrema generosidad.
La Severidad representa
la función de la fuerza,
el juicio y
el poder.
La Belleza,
emana inspiración
de redentora
equidad,
realzando con
su elegancia,
los dorados
puentes,
entre la Severidad y
la Misericordia.
Divinidad femenina,
inexorable triunfo de
la vida,
es la emanación de
la Victoria.
La Majestad,
es el poder de la
eterna virtud y
la gloria misericordiosa,
de expresar
gratitud.
La Fundación,
es la que refleja la
luz,
de toda emanación.
El Reino,
es el comienzo
de las formas,
es el punto de
partida.
Son las cabalísticas
emanaciones,
del Árbol de la
Vida.