Urnas clamorosas. La votación para elegir a los miembros de la Convención Constitucional y renovar los poderes locales vence a la represión. Tomás Hirsch: «Soñábamos con este resultado». Izquierda, pueblos y movimientos indígenas celebran. La comunista Irací Hassler es la nueva alcaldesa de Santiago.
Por Andrea Cegna para Il manifesto, 18.05.2021
«Nadie esperaba un resultado así. Quien lo diga ahora está mintiendo. Ciertamente, muchos y muchas lo habíamos soñado», dice Tomás Hirsch, diputado de Acción Humanista de Chile y uno de los coordinadores de la lista Apruebo Dignidad, una coalición formada con el Frente Amplio y el Partido Comunista.
Las elecciones para determinar la asamblea constituyente y renovar muchos cargos locales el 15 y 16 de mayo de 2021 se convirtieron en una derrota para la derecha del país, y en general para los partidos tradicionales.
La sensación al abrirse las urnas era muy distinta, los datos de baja participación (42,5%) preocupaban, y mucho, a la izquierda, convencida de que sólo una repetición de la participación del referéndum de octubre podría asegurarles el control de la Asamblea Constituyente. En cambio, la derecha, unida en una lista única, se llevó sólo 37 escaños de los 155.
El objetivo de la coalición «Vamos por Chile», que reunía desde los pinochetistas hasta el presidente Piñera, era arrebatar 1/3 de la asamblea constituyente, al menos 52 diputados, para poder vetarla durante el proceso de redacción de la nueva carta constitucional.
«Los partidos tradicionales, el llamado duopolio, han tenido en general un resultado muy malo. La Democracia Cristiana prácticamente desapareció, ya que sólo eligió a un representante de 155. Mientras que los municipios más importantes del país, empezando por Santiago de Chile, fueron ganados por candidatos de la izquierda del Frente Amplio o del Partido Comunista. En resumen, mucho más de lo que esperábamos», subrayó Hirsch.
Son 28 candidatos de la coalición Apruebo Dignidad, 25 los de Lista del Apruebo (centro izquierda) y una buena cantidad de 48 escaños arrebatados por candidatos independientes, la mayoría de estos representan los movimientos que a partir de octubre de 2019 llenarán las plazas con alta representación de movimientos feministas. Cierran la cuenta los 17 escaños asignados a los pueblos originales.
«Es evidente que haber obtenido más de los 2/3 necesarios para controlar la asamblea constituyente debería permitir no sólo suprimir las partes más antidemocráticas de la carta constitucional, sino convertirla en una constitución moderna y con visión de futuro. Es la primera constitución del mundo que será redactada por una asamblea con el mismo número de hombres y mujeres y con una fuerte representación de los pueblos originarios», recuerda el diputado humanista.
La lucha ha vencido a la represión, así se podría resumir el resultado. Ciertamente no fue muy diferente en las elecciones locales donde la derecha se derrumbó, los candidatos de la oposición ganaron directamente 3 regiones y en otras 10 pasaron a la segunda vuelta habiendo tenido más votos en la primera. La región de Valparaíso, la segunda más importante del país, será gobernada por Rodrigo Mundaca, candidato del Frente Amplio. Irací Hassler, del Partido Comunista, es en cambio la nueva alcaldesa de Santiago, la capital del país, superando a Felipe Alessandri, el alcalde saliente. Ningún alcalde en los últimos 24 años en Santiago ha conseguido ser elegido dos veces, la tradición no se ha roto pero ha sido una mujer, comunista, la que ha ganado, una novedad para la capital de un país que sigue teniendo en el machismo uno de sus puntos débiles. Nada más ser elegida, la nueva alcaldesa declaró: «Esperamos que lo que ocurra hoy en Santiago sea el preludio de lo que ocurrirá a nivel nacional. Hoy tenemos una oportunidad histórica, en este momento tan importante, tendremos una nueva Constitución y también tendremos una transformación desde los barrios del municipio de Santiago para conquistar nuestra dignidad y buen vivir, en este momento histórico de transformación. Vamos a construir con mucha fuerza un Municipio para el pueblo. Vamos con fuerza».
Al igual que en octubre, el Presidente Sebastián Piñera tuvo que reconocer la derrota «En estas elecciones se envió un mensaje fuerte y claro al gobierno y también a todas las fuerzas políticas tradicionales. No estamos respondiendo adecuadamente a las demandas y deseos de la ciudadanía».