POEMA
Te debo mil manjares con sabor a cerezas
mil paseos de tardes cuando el sol nos encuentra
mil cafés submarinos tendidos en la hierba
y te debo decir que blancas son las velas
que llegan por el mar
te debo el festival y esta nochebuena
que me acerca la sal de tu risa y me alegra
En un punto profundo estoy sabiendo
que te sigo en la vida, que te sigo en el tiempo
Y quiero amanecer aquí y allí
tomar la suavidad de este momento
escuchar que te llamo y me respondes
seguir tejiendo el cielo
y aún te debo
lo que sabes decirme sin palabras
tu sonrisa que pinta lo que quiero
tu mirada que llega y se hace alba
en el límpido espacio del silencio.