La Consejería de la Comunidad de Madrid ha sido condenada por poner en peligro a los médicos de Atención Primaria por no dotarles «de forma completa de los medios y medidas de protección en su centro de trabajo».
Por Humanistas de Carabanchel
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha sentenciado ayer que a los médicos de atención primaria y a los pediatras del sistema de salud público. La Consejería de Sanidad no les dotó «de forma completa de los medios y medidas de protección en su centro de trabajo». La demanda fue presentada por Atención Primaria Se Mueve el 3 de diciembre de 2020
Que han estado expuestos los médicos sin apenas medidas de protección los vecinos y vecinas ya lo sabíamos claro. Tampoco ha habido medios de protección suficientes para enfermeras, auxiliares o personal administrativo.
Y si la reclamación se presentó antes del COVID, es evidente que con la pandemia los riesgos se multiplicaron exponencialmente y que las consecuencias han sido dramáticas.
Pero aunque no nos diga nada que no sepamos, lo importante es que el Tribunal tiene capacidad para obligar al Gobierno de Ayuso a dotar de medios a los médicos que aseguren su salud y sus condiciones de trabajo. Según la sentencia, la Consejería de Sanidad tendrá que realizar una evaluación de riesgos y determinar la carga de trabajo que soportan los médicos y establecer una plantilla acorde con ella y con la cobertura de vacantes existentes. El programa fijará también los cupos, el número máximo de pacientes que deben atender por jornada de trabajo y el tiempo mínimo de dedicación a cada uno de ellos.
Todo ello había sido reclamado repetidamente por los médicos, pero la Consejería de Sanidad del Gobierno Ayuso no les había hecho ningún caso, más bien al contrario, ha permitido que el deterioro y la desmoralización de los médicos continuara creciendo con las consecuencias negativas que eso implicaba para la población de Madrid.
Lo celebramos y nos alegra esta noticia, es un reconocimiento al trabajo de los médicos, y un descrédito para el Gobierno de Ayuso, que en vez de reconocerlo lo ha desvalorado todo lo que ha podido, poniendo en peligro su salud y sus vidas.
Ya sabemos que al Gobierno de Ayuso no le gustan las comunidades autónomas que incumplen las sentencias de los tribunales y son los primeros en pedir mano dura para los desobedientes, así que esperamos que se pongan a trabajar de inmediato.