Durante una conferencia de prensa virtual, Dávila dijo estar asustado y preocupado ante lo que considera un atentado contra su vida.
“Fue un ataque directo. Yo sé lo que viví. Fue un atentado y no recibí ningún impacto porque mis custodios accionaron”, dijo el legislador.
“Escuché claramente cuando dijeron ‘¿Va ahí?’ y al otro lado contestaron ‘Sí, ahí va’. En ese momento me tiré al suelo del vehículo y el agente respondió, después de escuchar que nos golpeaban el vidrio en ambos lados con arma de fuego”, recordó.
Dávila lamentó que la policía esté minimizando el hecho, considerándolo un intento de asalto.
“No pueden hacer aseveraciones de que fue un intento de robo si aún no hay una investigación contundente, efectiva y eficaz del Ministerio Público”, manifestó.
“Temo por mi vida, desde hace más de un año, cuando se me llamó esperpento en una cadena nacional. Temo por la vida de mi personal y de mi familia”, concluyó el diputado.
Las reacciones de condena no se hicieron esperar.
“Condeno enérgicamente el cobarde atentado en contra del diputado Aldo Dávila, quien se ha caracterizado por defender derechos LGBTI. Recomiendo al Ministerio Público realizar las investigaciones correspondientes y a la Policía brindarle medidas de seguridad”, escribió Jordán Rodas, Procurador de Derechos Humanos (PDH).
En tanto, la Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos de Guatemala (UDEFEGUA) y OBS1 repudiaron el ataque, e instaron a las autoridades a realizar una pronta investigación “ante diversas agresiones sistemáticas” sufridas por Dávila en su contra.
El diputado del bloque Winaq recibió la solidaridad de la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Waqib’ Kej, que condenó el atentado y exigió la inmediata investigación de los hechos.
“Nuestra solidaridad con él y su equipo de trabajo. Los métodos del miedo contra opositores a la corrupción no deben impedir callar nuestras voces”, señaló.
Tanto como diputado, activista y defensor de los derechos de la comunidad LGBTI, Dávila ha venido denunciando públicamente el “pacto corrupto” que tiene secuestrado al estado guatemalteco.