7 de marzo 2021

Veinte días han logrado resistir un grupo de jóvenes que el 15 de febrero pasado se instalaron bloqueando el camino de acceso adonde se pretende construir la Central Rucalhue, a unos diez kilometros de Santa Bárbara, en la confluencia de los ríos Bio-bío y Quilmes. El proyecto fue aprobado en 2016 por las autoridades ambientales, a pesar de estar heridos casi de muerte ya, el pueblo Pehuenche y al ecosistema local, por la imposición, en los últimos treinta años, de tres enormes represas: las de Pangue, Ralco y Angostura. ¡Y se insiste en seguir con  el ecocidio!

En un ecosistema tan intervenido, de extrema fragilidad, con antigua y permanente posesión Pehuenche (hasta el día de hoy) siguen intentándose imponer no uno, sino varios projectos de centrales hidroeléctricas pequeñas y no tan pequeñas, “limpias y sustentables”, pero todas potencialmente fatales para el frágil sistema ecológico y humano. Dos son los proyectos actuales: la Central Rucalhue y la Pequeña (vaya nombre) Central Hidroeléctrica de Huequecura en la cercana localidad de Quillaileo.

Es verdad que si bien la toma no ha detenido definitivamente el proyecto, el grupo de jóvenes, liderados por tres organizaciones locales: Semillas del Lirken de Rucalhue, Somos Biobío y Movimiento Autoconvocado de Santa Bárbara han obligado ya dos veces a la empresa a sentarse a conversar y han generado una creciente solidaridad. Expresada con los constantes bocinazos de aquellos que transitan la carretera Q-61-R hacia el vecino Ralco, con la significativa asistencia a varios actos culturales organizados en la toma, y por el apoyo municipal con agua y un baño para los resistentes. Incluso el medio local SB Televisión les dedicó recientemente un programa que se puede ver aquí  https://www.facebook.com/watch/?ref=search&v=452591372848991&external_log_id=0ebd33f8-b5ca-4947-ba8a-ecfaae766285&q=sb%20televisi%C3%B3n

La toma tiene  lugar en un camino en construcción paralizado desde el 13 de febrero, día en que se interrumpieron los trabajos viales. Sería el acceso al cercano Biobío adonde se pretende instalar el muro, e inundar la confluencia del río Biobío con el pristino Río Quilmes.

Pero no es solo la toma la que complica a la empresa china. Durante las últimas semanas ha sido incapaz de conseguir declarar su proyecto como de interés público por lo cual aún no puede intervenir ejemplares de bosque nativo protegido por ley. Se trata de la intervención de especies forestales protegidas, como lo son el Guindo Santo y el Naranjillo, sólo posible si la actividad es declarada de interés nacional, a lo que se opuso recientemente la Municipalidad de Santa Bárbara, lo que llevó a la empresa que se desistiera de la petición (ver docs anexos..hay que subirlos a servidor resumen).

Pero la toma ha sacado a la luz también la inapropiada participación ciudadana, especialmente aquella de los Pehuenche.

EL ECOCIDIO CONTINUA EN EL BIO-BIO

Es que se continúa destruyendo progresivamente el hábitat y la vida, sobretodo de los miles de Pehuenche que hacen ya cientos de años habitan el sector. En ocasiones ni siquiera han sido reconocidos como tales, como sucediera con la Central Angostura construída por Colbún el año 2014. Como resultado de ese proyecto algunos Pehuenche resultaron relocalizados por segunda vez: primero por la central Pangue quien en 1991 los movió a la fuerza a Los Notros y luego por la Central Angostura, que nuevamente los trasladó algunos kilómetros mas abajo. A muchos nunca se les reconoció su calidad de indígenas.

En relación a los recursos naturales el componente cuya degradación ha sido más documentada es la de los peces, la fauna íctica en términos científicos. Lo explicaban claramente cinco científicos del centro Eula de la Universidad de Concepción, con ocasión de la evaluación ambiental de la Central Rucalhue.

Los científicos en el documento de 2014 insistieron en la necesidad de considerar el real estado del río:

“…han considerado como área de influencia solo una pequeña porción  del ecosistema fluvial, ignorando por ejemplo, la  interacción  río-mar  y  la  cadena  de  impactos  que se  generan  por  la  serie  de  aguas embalsadas, las que transforman, fragmentan y alteran gran parte del área ritrón del río.  La  zona  de  ritrón  del  río Biobío,  del  cual  ya  se  han  embalsado  aproximadamente  70  km lineales  del  ecosistema fluivial,  corresponde  al tramo más  prístino,  oligotrófico,  de mejor calidad  del  agua  y  de  una  gran  diversidad  biológica.  Todos  estos  aspectos  se  han ignorados  o  bien  no  han  sido  tratados  correctamente  en  las  evaluaciones  ambientales. .”

Según el Eula, no se han considerado los estudios que obligatoriamente debieran estar llevando  cabo Endesa (hoy Enel), dueños de Pangue y Ralco.

“No  es  lo  mismo  construir  una  cuarta  o  quinta  central  hidroeléctrica  en  el curso  principal  del  río,  que  la  primera  o  segunda. .. La  línea  base  ambiental  del  EIA  ignora  y  desconoce  los  impactos  ambientales proyectados a las centrales Pangue, Ralco y Angostura. Al respecto, no analiza ni discute si ellos han ocurrido, o han emergido nuevos impactos no predichos, ni si los programas de seguimiento ambiental informan sobre éstos. Sin ese conocimiento, la línea de base de Rucalhue es incompleta, ya que no da cuenta de la condición actual del río más allá del área de  donde  ocurren  sus  acciones  (NO  sus  impactos).  Por  tanto,  una  línea  de  base incompleta, no permite realizar una evaluación de los impactos de la nueva central que son acumulativos  y  sinérgicos  a  los  del  complejo  de  centrales  ubicados  directamente  aguas arriba”

Como si esto fuera poco otra empresa, esta vez la empresa Los Morros S.A., controlada por una fondo de inversión asociado a una empresa minera está insitiendo, ¡por sexta vez! con un proyecto hidroeléctrico en el río Quillaileo, para represar otro de los únicos hábitats restantes (junto al Quilmes que inundaría Rucalhue) para los peces endémicos y en peligro de extinción. Se trata del obtuso intento del holding Los Morros S.A. de Inversiones Carenpa S.A. controladores del 38% de la transnacional de minería no-metálica Molymet.

INCIERTO FUTURO

Como decíamos al principio, los jóvenes en toma han sentado dos veces a la empresa a conversar. La primera vez el 17 de febrero en el lugar mismo de la toma. En la ocasión Emilio Urriola chileno representante de la empresa y un funcionario chino, identificado como traductor, intentaron ver como se podían identificar asuntos pendientes y conversar respecto a posibles soluciones. Querían una reunión urgente en uno o dos días, más con el fin de poder retomar los trabajos. Los jóvenes insistieron no estar disponibles para negociar dado que su intención era que no se hiciera el proyecto, pero  aceptaron sin embargo una nueva reunión, pero una semana después.

En esa reunión sostenida el pasado viernes en el Hogar Indígena de Santa Barbara los jóvenes, acompañados de un par de aliados/asesores, plantearon sus fuertes reparos al proyecto, no sólo en el ámbito ambiental, sino en la falta de participación ciudadana. Por este motivo participó en la última reunión la Pehuenche Hilda Riquelme hija de una de las mujeres que resistieron al proyecto Ralco, miembra de Mapu Domuche Newen y hoy propietaria de tierras en las cercanías. Ella insiste nunca haber sido consultada. En la reunión no se llegó a acuerdo y fue terminada abruptamente por la empresa.

“La empresa reitera su posición de continuar las obras, buscando generar negociaciones como solución ante la problemática de la sinergia destructiva ecológica, sin asumir realizar una participación ciudadana nuevamente  o consulta  indígena de forma más representativa” recuerda uno de los asistentes a la reunión.

Los jóvenes han continuado movilizando a la gente. Al día siguiente en la toma se escucharon desde raperos locales a artistas folkloricos. Se agregó ese día otro letrero al principal “Nosotros somos el río”. Se trata de un gran letrero escrito en mandarin que se levantó cerca del escenario. “Las aguas y las montañas verdes son nuestra sangre y nuestro cuerpo” decía la frase que correspondería al presidente chino.

El 8 de marzo, como no, llegaron en masa mujeres del sector.

Nadie descarta que el permiso faltante a la central Rucalhue eventualmente sea otorgado, aunque según la ley no podrían ser intervenidos ni naranjillos ni guindo-santos, a no ser por interés nacional, calificación que no logró sortear la empresa, lo que la llevó a desistirse de ese proceso (ver documentos aquí) para la obtención del permiso.

Contactos con la elite del poder buracrático no parecen faltarle a la empresa China. Después de todo la empresa matriz de China International Water & Electric Corporation (CWE) es nada menos que la estatal Three Gorges Dam, operadores del mayor complejo hidroeléctrico del mundo!

Personas claves trabajan para ellos. Por ejemplo uno de los participantes en la importante reunión sostenida el pasado viernes 5 de marzo entre los jóvenes en toma y la empresa fue Freddy Castillo profesional que trabajó anteriormente cuatro años con CONAF, precisamente en manejo de bosque nativo. Que ironía que ahora esté maquineando alguna triquiñuela para aprobar un permiso en el servicio adonde hasta hace pocos años trabajaba. Otro contacto es el diputado Pablo Vidal, ex RD quien reconoció haber trabajado por Atiaia, anteriores dueños del proyecto, relacionándose con algunas de las familias afectadas, algunos de cuyos miembros lo funaron exitosamente en redes las sociales (ver artículo Resumen). Vidal es ahora presidente de la Comisión de Energía y Minería de la Cámara de Diputados.

En cualquier momento la empresa podría ordenar el desalojo.

No sé porqué surge a la mente el ruego de Mariano Puga: “Que la Lucha no Pare Nunca”. Parece escucharse en el campamento. ¿Será por estar la acción de resistencia ubicada a sólo 100 metros del fundo Los Junquillos de propiedad de la familia Puga, donde Mariano pasó muchos veranos de su vida?

originalmente publicada en resumen.cl