«Un momento determinante en el proceso de búsqueda de verdad y justicia»
El 6 de abril iniciará en Honduras el juicio oral y público contra David Castillo, acusado de ser coautor del asesinato de la luchadora social Berta Cáceres.
«Después de cinco años de estar en esta batalla llega un momento determinante en el proceso de búsqueda de verdad y justicia», dijo en conferencia de prensa Bertha Zúniga Cáceres, hija de la lideresa indígena y actual coordinadora del Consejo cívico de organizaciones populares e indígenas de Honduras (Copinh).
David Castillo fue presidente de la empresa Desarrollos Energéticos SA (DESA), titular del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca contra el cual Berta Cáceres y el Copinh lucharon durante años, y ex oficial de la inteligencia militar hondureña, graduado de la academia militar estadounidense de West Point.
«Castillo es un coautor del asesinato y es una pieza clave que conecta con los autores intelectuales, es decir con actores económicos muy influyentes en nuestro país y que gozan de absoluta impunidad.
Juntos generaron un patrón de persecución permanente contra el Copinh y contra Berta, no sólo en cuanto luchadora social y lideresa de este proceso de resistencia territorial, sino también en cuanto mujer.
Es imposible entender el asesinato de Berta Cáceres -continuó Zúniga- sin entender el contexto de ataques sistemáticos que le antecedió y que también son parte integrante del crimen.
Toda esta impunidad se convierte en una deuda más del Estado de Honduras con la justicia» (vea aquí todo sobre la Causa Berta Cáceres)
En diciembre de 2019, los autores materiales del crimen fueron sentenciados a entre 30 y 50 años de cárcel, entre ellos ex dirigentes y miembros de la seguridad de Desa, ex militares y militares activos.
En más de una ocasión, tanto la familia de Berta Cáceres como el Copinh han señalado el vínculo que existiría entre la estructura criminal que ejecutó el asesinato y la poderosa familia Atala Zablah.
Hasta el momento, el Estado de Honduras no ha mostrado la voluntad política de involucrarlos en los juicios, aunque al finalizar la audiencia de proposición de pruebas contra Castillo, el tribunal decidió admitir a Daniel Atala Midence, ex gerente financiero de Desa, en calidad de testigo calificado.
«Este proceso va a ser un desafío. Vamos a necesitar de todo el apoyo y la solidaridad de las personas y organizaciones que nos han acompañado en todos estos años y que han sido parte de esta lucha.
Asimismo, es importante entender que con esta nueva etapa (el juicio contra David Castillo) no se cierra el proceso de búsqueda de verdad y justicia. ¡Faltan los autores intelectuales!», sentenció Bertha Zúniga Cáceres.