Un nuevo estudio revela que la magnetosfera de la Tierra puede crear agua en la Luna, lo que implica que otros planetas podrían aportar agua a sus satélites.
Los resultados del estudio, publicados el jueves en la revista Astrophysical Journal Letters muestran que el agua es mucho más frecuente en el espacio de lo que los astrónomos pensaron en un principio, desde la superficie de Marte hasta las lunas de Júpiter y los anillos, cometas, asteroides y Plutón; incluso se ha detectado en nubes mucho más allá de nuestro sistema solar.
Al comparar una serie temporal de mapas de la superficie del agua antes, durante y después del tránsito de la magnetosfera, los investigadores argumentan que el agua lunar podría reponerse mediante flujos de iones magnetosféricos, también conocidos como “viento terrestre”.
La presencia de estos iones derivados de la Tierra cerca de la luna fue confirmada por el satélite Kaguya, mientras que las observaciones del satélite THEMIS-ARTEMIS se utilizaron para perfilar las características distintivas de los iones en el viento solar frente a los del viento terrestre de la magnetosfera.
Las observaciones anteriores del satélite Kaguya durante la luna llena detectaron altas concentraciones de isótopos de oxígeno que se filtraron de la capa de ozono de la Tierra y se incrustaron en el suelo lunar, junto con una abundancia de iones de hidrógeno en la vasta atmósfera extendida de nuestro planeta, conocida como exosfera.