El miércoles, Joe Biden tomó posesión como el 46.° presidente de Estados Unidos, concluyendo así el tumultuoso mandato único de Donald Trump. Biden, quien juró el cargo al mediodía, asumirá el manejo de una pandemia devastadora.
El martes por la noche, Biden y la vicepresidenta entrante Kamala Harris rindieron homenaje y lideraron un duelo nacional por las víctimas del coronavirus en el Monumento a Lincoln. Cuatrocientas luces iluminaron la piscina reflectante en conmemoración de las más de 400.000 personas que perdieron la vida debido a la COVID-19 en Estados Unidos. Biden y Harris dieron un discurso durante el homenaje.
Presidente electo Joe Biden: “Para sanar, debemos recordar. Y, a veces, es difícil recordar, pero así es como sanamos. Es importante hacerlo como nación. Por eso estamos aquí hoy”.
Vicepresidenta electa Kamala Harris: “Durante muchos meses, estuvimos de luto solos. Esta noche, estamos de luto y comenzamos a sanar juntos. Aunque físicamente estemos separados, nosotros, el pueblo estadounidense, estamos unidos en espíritu”.
Kamala Harris hace historia como la primera vicepresidenta de Estados Unidos. Harris también es la primera afroestadounidense, la primera asiáticaestadounidense y la primera indiaestadounidense en ocupar el cargo. Como vicepresidenta, Harris juramentará a tres nuevos senadores demócratas por la tarde y así le dará el control del Senado a su partido: Raphael Warnock y Jon Ossoff, quienes ganaron las elecciones de segunda vuelta en el estado de Georgia a principios de enero, y Alex Padilla, quien la reemplazará en el escaño de la cámara en representación del estado de California.
El vicepresidente saliente Mike Pence asistió el miércoles a la investidura presidencial y no estuvo presente en la despedida de Trump en la base conjunta Andrews. Trump, quien no asistió a la toma de posesión, publicó un video de despedida el martes.
Presidente Donald Trump: “Ahora, mientras me preparo para entregarle el poder a un nuevo Gobierno el miércoles al mediodía, quiero que sepan que el movimiento que iniciamos apenas comienza”.
En una de sus últimas medidas como presidente, Trump revocó su propia orden ejecutiva de 2017, que prohibía a las personas designadas por el Gobierno federal realizar actividades de cabildeo para influir en el funcionamiento de los organismos en los que trabajaban dentro de los cinco años posteriores a su salida del Gobierno.