En Colombia, sumado a la crisis generada por la pandemia y los desastres naturales, la violencia no da tregua y se recrudece cada día más en contra de líderes sociales y excombatientes de las FARC. Durante el fin de semana anterior se presentaron hechos muy lamentables en términos de pérdida de vidas humanas, que se sumaron a las registradas en el mes de octubre y a los demás hechos, como amenazas y atentados a líderes sociales y políticos, entre ellos contra el Senador de la República Feliciano Valencia, líder indígena Nasa, quien en menos de dos semanas sufrió dos atentados.
Por: Zenaida Espinosa Cabrera
Viernes 13 de noviembre: Se presentó una masacre en Tierra Alta (Córdoba) donde fue asesinada la Lideresa Onilda María Díaz Urango, junto a su esposo James Correa y su hija Luisa Fernanda Correa. Onilda María era una lideresa inscrita en el programa Nacional Integral de Sustitución de cultivos ilícitos (PNIS) y la familia hace parte de la Junta de Acción Comunal de la vereda Llanos del Tigre.
Sábado 14 de noviembre: Asesinado un excombatiente de la FARC, firmante de los Acuerdos de Paz, Heiner Cuesta Mena, en el corregimiento de Neguá, Municipio de Quibdó, Departamento del Chocó. Mientras tanto, el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria (FARC) denunció a través de su cuenta de Twitter que, con la muerte de Cuesta Mena, asciende a 239 el número de ex guerrilleros asesinados desde que se firmó el Acuerdo de Paz, en noviembre de 2016.
Este mismo día se presentó un doble asesinato en el corregimiento de San Juan de Micay en el Tambo, departamento del Cauca, donde perdieron la vida Rigoberto Camilo Caicedo y Helena Johana Yale Muñoz, miembros de la comunidad afro descendiente de la vereda Recogedero.
Domingo 15 de noviembre: Tres hechos enlutan de nuevo al país en este mismo día. En el Departamento del Caquetá, fue asesinado otro firmante de los Acuerdos de Paz, Jorge Riaños, quien fue abordado por hombres armados que llegaron hasta el lugar donde se encontraba en la ciudad de Florencia, capital del departamento del Caquetá.
En Puerto Guzmán, Municipio del Departamento del Putumayo fue asesinada la lideresa comunal y actual concejal de este Municipio, Neriet Penna, junto a su esposo Enod López Bergano, firmante del Acuerdo de Paz. En el mismo hecho resultaron heridos sus dos, que fueron trasladados a centros hospitalarios. Penna había sido presidenta de la Junta de Acción Comunal de la Inspección de Galilea y había formado parte del Concejo Municipal de Planeación Participativa de la localidad.
Este trágico fin de semana, finalizó con el asesinato de dos menores de 14 y 17 en el Departamento del Huila, en medio de un retén militar. Los hechos “se dan en medio de labores de registro y control realizadas en la vereda Palmar de Obando del Municipio de San Agustín, al sur del Huila, sitio donde fue instalado un puesto de control” expresó la Institución Castrense.
Cabe de anotar que a finales del mes de octubre, excombatientes de las FARC de todas las regiones del país, realizaron una peregrinación hasta la capital del País, a la que denominaron “Por la Paz y por la Vida”, en rechazo a los asesinatos de sus militantes; dicha movilización finalizó el 6 de noviembre en una reunión con el presidente Iván Duque, que calificaron de “alentadora”. De acuerdo al último informe del Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, ante el Consejo de Seguridad sobre la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, “la violencia incesante contra ex combatientes sigue afectando la consolidación de la paz”.