El candidato presidencial del Partido Verde, Howie Hawkins, solidarizó de forma presencial con el comité de solidaridad contra la destrucción del Cementerio Moses de ex esclavos que está siendo arrasado por una empresa constructora en Bethesda, en los suburbios de Maryland, área metropolitana de Washington DC. El sitio se usará para construir un edificio comercial.
El caso es emblemático sobre el debate permanentemente abierto de las necesidades de reparación histórica y reconocimiento para los descendientes de millones de africanos y afroestadounidenses que sufrieron el flagelo de la esclavitud.
El caso lleva años organizando a la comunidad, agrupada en torno a la Coalición del Cementerio Afroestadounidense de Bethesda (más información, aquí: https://www.BethesdaAfricanCemetery.org).
El área en cuestión solía ser una antigua plantación de tabaco que empleaba a esclavos. Durante un periodo se usó también como lugar de reproducción forzada de mujeres esclavas para aumentar la población de mano de obra. Posterior a la época esclavista, se convirtió en una comunidad sólida de afroestadounidenses descendientes de esos esclavos, hasta que fueron desplazados por la actual población mayoritariamente blanca y de altos ingresos de Bethesda.
“Por siglos estos crímenes contra la humanidad no se han detenido. El mercado de bienes raíces siempre ha estado relacionado con ganancias que emanan de la segregación, la discriminación y la explotación”, expresó el candidato Howie Hawkins frente a los manifestantes.
Agregó que “todo este caso tiene que ver con hacer dinero para la gente que ya tiene dinero, ya sea a través de la esclavitud, o el desplazamiento de la comunidad negra desde los suburbios para hacer construcciones. Mucha gente hizo dinero de esa forma. Y ahora, violando el carácter sagrado de un cementerio que documenta crímenes contra la humanidad”.
La candidata a vicepresidenta, Ángela Walker, señaló que “como descendiente de esclavos africanos, estoy particularmente preocupada y afectada por la destrucción de un cementerio africano en Bethesda, Maryland. La historia de la esclavitud de africanos en Estados Unidos es una historia brutal, ofensiva y triste. Los sitios donde hay restos de nuestros ancestros deben ser tratados con respeto, debido a su carácter sagrado. La destrucción del sitio en Bethesda es una continuación de la devaluación de las vidas negras en este país”.
La protesta de hoy se inició frente a la iglesia bautista Macedonia (http://www.mbc-bethesda.org), una de las pocas estructuras que sobreviven desde la época en que el sitio era un área afroestadounidense. Los manifestantes marcharon hacia el sitio de la construcción ubicado a pasos de River Road y Landy Lane, donde demandaron a las autoridades del Condado de Montgomery el cese inmediato de las faenas, y la contratación urgente de arqueólogos que puedan hacer una documentación profesional del sitio y rescatar los artefactos que existan en el área.