Desde muchas ciudades del mundo, no sólo en los Estados Unidos, se manifiestan miles de personas -sin reparo mayor respecto de la distancia social a sostener todavía en esta época marcada por el coronavirus- para no dejar pasar la violencia con la que descaradamente se pisotearon (literalmente) todos los derechos de George Floys. En las calles, plazas, lugares públicos y también por las redes sociales, donde simplemente se ha puesto toda la pantalla de negro, ya no se acepta más la discriminación contra los negros. En Berlín, en Londres, la indignación de la gente se hace sentir.
Ante estas masivas protestas sociales, muchos policías norteamericanos han colocado una de sus rodillas en la tierra en señal de arrepentimiento institucional, levantando la esperanza por un futuro mejor.
Las fotos que publicamos son de las manifestaciones en Berlín, donde por segundo día consecutivo se manifiestan miles ante la Embajada Norteamericana. Las imágenes son de Dani Horowitz.