Según la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la Organizaciòn de Naciones Unidas (ONU), los ataques de colonos israelíes tuvieron un severo incremento durante los meses de marzo y abril a pesar de las restricciones para evitar la propagación del coronavirus.
por Notas Periodismo Popular
Un estudio basado en cifras de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de la Organzación de Naciones Unidas (OCHA) resalta el incremento del 37% de ataques de colonos israelíes contra palestinos y sus propiedades en el territorio cisjordano ocupado. Las agersiones tuvieron lugar durante marzo y abril, meses marcados por las severas restricciones para evitar la propagación de la Covid-19.
“Estos ataques ignoran las restricciones al movimiento impuestas por el Ministerio de Sanidad israelí y socavan los esfuerzos tanto israelíes como palestinos en la lucha contra la pandemia”, señala el informe.
La mayoría de los ofensivas registradas durante el confinamiento (136 entre el 5 de marzo y el 30 de abril) fueron daños contra tierras o vehículos de palestinos y menos de un 15% de ellos causaron heridos. En lo que va del año, por otra parte, se han registrado un total de 68 ataques de palestinos contra colonos israelíes en territorio cisjordano.
“Lamentablemente, los palestinos están siendo desalojados y sus hogares destruidos con mayor frecuencia durante la pandemia de la Covid-19”, expresó Shane Stevenson, director de la oficina de la ONG Oxfam para los territorios palestinos ocupados, para añadir que “familias inocentes quedan en estado de vulnerabilidad, especialmente cuando deberían permanecer en casa y mantener su salud”.
A su vez, durante estos meses el gobierno israelí desalojó seis estructuras en los alrededores del asentamiento de Yitzhar, en el norte de Cisjordania, y aprobó la construcción de 7.000 nuevas residencias en la colonia de Efrat.
Se calcula que unos 570 mil colonos israelíes viven en más de 120 asentamientos ilegales construidos en Cisjordania y Jerusalén Este, en territorios palestinos ocupados tras la Guerra de los Seis Días en 1967.
La presencia militar israelí en los territorios palestinos de Gaza, Cisjordania o Jerusalén Este plantea una gran cantidad de problemas para la población. La violencia directa es la más evidente, sin embargo las dificultades para acceder a derechos básicos, como la educación, son también una constante.