Una ola de «protestas digitales» golpea a un país que se encuentra en cuarentena.

Rusia está en medio de una estricta cuarentena debido al COVID-19. Aunque los manifestantes no pueden salir a las calles, siguen realizando manifestaciones masivas – digitalmente.

Hoy, los residentes de la ciudad sureña de Rostov del Don se han reunido frente al edificio del gobierno local para protestar contra el estricto régimen de autoaislamiento, que está en vigor en la región desde principios de abril. También exigen el pago de prestaciones sociales a los que han perdido sus empleos mientras el país lucha por contener la pandemia.

Estas «reuniones» se están llevando a cabo a través de Yandex.Navigator, una aplicación dirigida por uno de los mayores gigantes digitales de Rusia. La popular herramienta SatNav permite a los propios conductores informar en tiempo real sobre la situación del tráfico en las carreteras. Esa característica ha permitido a los usuarios que tienen intereses personales etiquetarse a sí mismos en lugares políticamente simbólicos y escribir lemas de protesta en sus comentarios. Muchos se enfurecen por las pérdidas financieras que han sufrido como resultado del autoaislamiento, y culpan al Estado por no ofrecer suficiente apoyo. «¡No hay dinero para pagar los préstamos! ¿Qué se supone que debemos hacer?» se lee en el comentario de la pantalla de la izquierda en la imagen de arriba. «Bien, entonces cancelen los impuestos, préstamos, etc.» y «declaren un estado de emergencia o detengan las restricciones a la gente», se lee en los del centro y la derecha.

Los medios de comunicación locales, como el canal de televisión Don-TV, pronto retomaron la protesta:

Una protesta virtual se está llevando a cabo en Rostov debido a la introducción de nuevos permisos [es decir, las restricciones del régimen de cuarentena]

Apenas unas horas más tarde, estas «manifestaciones en ausencia» se habían extendido por todo el país, desde Moscú a San Petersburgo, Ekaterimburgo y Nizhny Novgorod. De repente, la aplicación mostraba las plazas y calles vacías de las ciudades en cuarentena como «congestionadas». Para cuando el reportaje había surgido en la ciudad siberiana de Krasnoyarsk, el popular bloguero Alexander Plushchev preguntó lo siguiente en su canal de telegramas:

Creo que para esta noche, las manifestaciones digitales habrán tomado todo el país. ¿No lo entienden los del Kremlin?

Alexander Plushchev, Telegrama, 20 de abril de 2020

Estas manifestaciones tienen aún más resonancia dadas las notorias dificultades burocráticas de celebrar protestas «en persona» en los últimos años. En Rusia, las protestas masivas requieren la autorización previa de la policía; sin ella, los ciudadanos deben protestar solos, lo que ha convertido a los «piquetes solitarios» en un elemento básico de las manifestaciones políticas rusas de los últimos años. En estas condiciones, la protesta en línea es una alternativa atractiva, sobre todo cuando últimamente ha habido muchas cosas contra las que protestar. En el espacio de un año, Rusia ha sido testigo de protestas masivas contra la exclusión de los candidatos de la oposición independiente de las elecciones locales y, más recientemente, contra los cambios constitucionales propuestos que permitirán al Presidente Vladimir Putin continuar con sus mandatos. El movimiento ¡No! ha declarado una protesta en línea contra esta última, que se celebrará el 28 de abril.

No hay obstáculos legales per se para las «manifestaciones en línea» de hoy. Pero puede ser demasiado pronto para regodearse.

Si bien los usuarios de los medios sociales rusos están cada vez más a merced de las autoridades por las declaraciones de oposición en línea que se expresan con firmeza, los comentarios que se dejaron en la aplicación Yandex.Navigator no fueron en un principio moderados en absoluto. Hay que reconocer que la plataforma no es la más obvia para la disidencia política. Sin embargo, al final de la tarde un portavoz de Yandex dijo al diario Vedomosti que «cualquier mensaje que no se refiera a la situación en las carreteras o contenga blasfemias siempre se borra», y añadió que el gran número de esos mensajes podría interferir en la carga de la aplicación y, por lo tanto, en la navegación.

Yandex finalmente comenzó a «dispersar» las protestas en línea borrando los comentarios. Aquí Oleg Stepanov, un coordinador de la sede del destacado activista de la oposición Alexey Navalny, sugiere escribir más, con renovado vigor:

Ahora mismo Yandex está dispersando una «protesta no autorizada» contra Putin en la Plaza Roja!

Los moscovitas están dejando cientos de comentarios, pero los administradores los están borrando en grandes cantidades. Compruébelo usted mismo.

Yandex, al igual que los otros gigantes digitales de Rusia, se ha visto cada vez más influenciado por el gobierno en los últimos meses. Este está obligado a mantener los datos sobre los usuarios rusos en la jurisdicción rusa y a transferirlos a los servicios de seguridad cuando lo soliciten. Sarkis Darbinyan de Roskomsvoboda, una ONG que vigila las libertades en línea en Rusia, señaló hoy en comentarios a Kod Durova que si bien los manifestantes rusos pueden haber sido particularmente astutos en la búsqueda de otra plataforma para la disidencia, eso no los hacía necesariamente más seguros:

Por supuesto, ellos pueden fácilmente poner fin a todo esto. Todo el mundo entiende que Yandex tiene buenas relaciones con la administración presidencial, y si emite las órdenes apropiadas, entonces Yandex simplemente apagará estas «pequeñas charlas» o comenzará a limpiarlas manualmente con la ayuda de sus moderadores. Además, no olvide que cualquier información sobre los usuarios que gritan sobre un cierto «Dutin» que es un «Pick» (juego de palabras en inglés: se juega con Putin, el presidente y «dick» que en español quiere decir imbécil o cretino) puede ser entregada a la fuerzas del orden, quienes pueden entonces considerar si se presenta un caso penal o administrativo en su contra.

Con el telón de fondo de esta colorida historia, es importante recordar que algunos ciudadanos rusos están violando el régimen de auto-aislamiento y están protestando de verdad. Hoy, varios cientos de residentes de Vladikavkaz, capital de la República de Osetia del Norte, salieron a las calles para exigir la dimisión del gobernador de la empobrecida región del Cáucaso septentrional de Rusia. Argumentan que no pueden permitirse el autoaislamiento y exigen una compensación financiera. No se trata de una protesta virtual y, lo que es más preocupante, algunos destacados manifestantes sostienen teorías de conspiración sobre la pandemia y creen que el virus no supone una amenaza para su salud.

Escrito por Maxim Edwards


Traducción del inglés por Armando Yánez

El artículo original se puede leer aquí