Los resultados de la elección deliberada de la Unión Europea (UE) de imponer responsabilidades a los Estados miembros a través de políticas de austeridad están siendo ilustrados por el fracaso actual de los sistemas de atención médica y los servicios públicos; a pesar del coraje y el sacrificio demostrado por los trabajadores. Exigamos que las lecciones de esta crisis las aprendan ahora.La salud no es un gasto; sino inversión, la salud no es una mercancía.
La UE aún puede superar esta crisis cambiando radicalmente el curso de esta institución. La UE ya no puede depender de las directivas de la Comisión Europea y del Consejo de Ministros o de las del Banco Central y el Fondo Monetario Internacional que lo han reducido a ser solo una entidad de control económico, imponiendo una austeridad que sirve a las finanzas y a las industrias internacionales. La UE debe convertirse en una entidad política responsable de organizar la solidaridad social a partir de servicios públicos fuertes capaces de hacer frente a los caprichos de la vida y garantizar acceso a todas las poblaciones. El Parlamento Europeo, que representa a los pueblos, debe tener un papel preponderante.
Es a este precio al que una Europa política y social puede tener futuro. Hacemos un llamamiento a la solidaridad entre los pueblos, a la abolición de las fronteras, a la conciencia de nuestro objetivo común: un servicio universal de salud pública. Para Europa, exigimos un servicio de salud pública universal y unido, accesible para todos, en todas partes.
Los gobiernos nacionales, entre ellos el español y muy por encima de otros lugares del Estado, el de la Comunidad de Madrid han reducido temerariamente el gasto público, particularmente en el área de protección social y salud. Este enfoque favoreció el mercado y condujo a una pérdida evidente de la calidad asistencial: hoy en día, existen desigualdades significativas en el acceso a la atención de la salud, vinculadas al estado socioeconómico de las personas. La atención médica ha privatizado, parasitada por el mercado.
¿ Qué pasa ahora ante un virus como el Covi 19 ?
La Red Europea contra Privatización y Comercialización de la Salud y Protección Social, de la que formamos parte y el Día Internacional contra la Privatización Sanitarios y la Protección Social reafirman que es esencial, hoy más que nunca, un sistema de salud pública europeo sólido, unidos, de calidad y accesibles a toda la población. Este sistema debe ser financiado por recursos públicos, a través de impuestos o contribuciones sociales, dependiendo del país, para permitir una respuesta completa y universal a las necesidades de salud.
¿Cómo participar en este 7 de abril?
Pedimos que muestres tu apoyo para “Difundir la solidaridad, no el virus». Usa tu ventana, balcón o terraza y coloca hojas blancas o sábanas con el mensaje #health4all y/o #saludparatodos, toma fotos y compártelas en redes con dichos hashtags y deja constancia de ello en este mapa DIA INTERNACIONAL CONTRA LA PRIVATIZACIÓN SANITARIA