La iniciativa, que contará con un sitio virtual y uno material, pretende contruir su relato en base a testimonios e icónos de la revuelta.
Por Camila Sierra
Con la necesidad de documentar lo sucedido en Chile desde el pasado 18 de octubre es que se dio origen al llamado Museo del Estallido Social. Con el objetivo de construirlo en base a elementos presentes y vivos, se pretende recopilar desde testimonios de personas hasta íconos materiales que forman parte del imaginario colectivo creado en torno a las demandas sociales que se han manifestado durante la revuelta. La iniciativa contará con una sede física y una plataforma virtual.
A cargo de un equipo de colaboradores, el proyecto museológico cuenta con la curatoría de Marcel Solá, artista visual y magíster en Museología de la Universidad de Valladolid, España, quien es además el creador del monumento al famoso Negro Matapacos y otras intervenciones de arte denuncia. «Un equipo multidisciplinario de vasta experiencia hace posible la gestión y proyección de este proyecto para que pueda exponer y visibilizar a los ojos del mundo lo que está ocurriendo en Chile», explican a través de un comunicado.
A propósito de la decisión del actual gobierno de reducir en contenido la asignatura de Historia en los establecimientos escolares, el equipo plantea que «se hace aún más importante que el pueblo, a través de la activa autogestión, construya su propia memoria, desde el aquí y ahora, desde el espacio público, más que delegar esa tarea en los ministerios que desestiman la crítica en busca de mejoras sociales».
Por otra parte, sostienen que en el marco actual de la pandemia mundial por el virus Covid-19, donde el Presidente Sebastián Piñera declaró Estado de Catástrofe, «nos quieren borrar todo vestigio de las manifestaciones en el espacio público, el mismo que hace meses transformamos, desde su desatención como ‘tierra de nadie’ en nuestro ‘espacio compartido’».
En ese sentido, invitan a todos quienes quieran colaborar con este proyecto a ofrecer testimonios de lucha, y a donar material y elementos que puedan tener un valor simbólico para la colección. Del mismo modo, se pueden hacer aportes económicos para la implementación y sostenimiento de este espacio colectivo de reflexión a través del siguiente link.