Nuestro amigo y foto periodista de Pressenza, Antonio Sempere, inauguró ayer en el edificio del reloj de la Diputación de Barcelona una nueva exposición fotográfica, testimonio de su experiencia con los refugiados de los Balcanes.
Antonio hizo una conmovedora presentación de la selección fotográfica que resume su estadía de casi dos años trabajando con refugiados en los bosques serbios, croatas y bosnios. Su trabajo consistía en ofrecer comida y duchas de agua caliente a estas personas, que al no estar en los campos de refugiados carecen de todo; de un lugar donde cobijarse y donde asearse, de comida y de ropa. Antonio comenta “el medio es muy duro, en invierno se pueden alcanzar los -20ºC o -30ºC y los refugiados caminan continuamente buscando cobijo o un momento adecuado para pasar la frontera. Hay muchos niños desde 12 a 18 años que viajan solos.”
Durante el año 2015 los refugiados provenientes de Oriente Medio atravesaban Croacia, Serbia, Austria y Hungría para desplazarse desde el sureste de Europa hasta los países occidentales de la Unión Europea, hasta que estos países fueron cerrando sus fronteras y miles de refugiados quedaron atrapados en campos de refugiados o en los bosques.
Muchos de los migrantes han denunciado malos tratos a manos de las fuerzas policiales. Las fotografías muestran su situación cotidiana y su entorno; las vallas electrificadas y coronadas con concertinas que construyó Hungría a lo largo de 175 Km de su frontera con Serbia, las granjas, edificaciones abandonadas y tiendas de campaña que les sirven de cobijo, la visita del grupo de payasos “Abriendo esperanzas”, niños asustados, jóvenes apesadumbrados, mujeres buscando refugio, todos intentando sobrevivir en condiciones durísimas.
