El gobierno de España a través del Ministerio del Interior ha anunciado en el día de hoy que los trabajos para retirar las concertinas, que coronan las vallas en los perímetros fronterizos de Ceuta y Melilla con Marruecos, comenzaran antes de que acabe este mes de Noviembre, una vez salvados los tramites administrativos necesarios para poder realizarlos.
Con esta medida, anunciada por el gobierno de Pedro Sánchez cuando accedió al poder tras la moción de censura, se pretende modernizar y reforzar las vallas de Ceuta y Melilla, tal como ha ido subrayando el Ministro del Interior, Grande-Marlaska, en las tantas veces que ha sido preguntado al respecto: “se buscará la manera de que las fronteras sean lo menos lesivas para las personas que las intentan cruzar de manera ilegal”. La sustitución de las cuchillas por otros elementos menos cruentos es un compromiso casi personal del Ministro del Interior: «haré todo para que las concertinas puedan ser retiradas”, dijo el titular de Interior en funciones reconociendo el daño que las concertinas producían a las personas que intentaban saltar las vallas que rodean las fronteras con Marruecos, en las dos ciudades autónomas españolas en el norte de África.
Las obras comenzarán antes de que acabe noviembre y según estima el Ministerio tendrán un plazo de ejecución de diez meses, con un coste de alrededor de 18 millones de euros.
Estas medidas contempladas en el Plan de Refuerzo y Modernización del Sistema de Protección Fronteriza Terrestre en Ceuta y Melilla, que fueron aprobadas en Consejo de Ministros a primeros de este año, permitirán la sustitución de las concertinas y las sirgas tridimensionales en todo el perímetro por otros elementos más seguros y menos lesivos.
El objetivo de este Plan, según la nota de Interior, es incrementar la seguridad del perímetro fronterizo, ya que desde el año 2006 solo se han hecho reformas concretas para reparar daños producidos por la climatología o por las entradas, a veces masivas, de personas. Esta actuación es, por lo tanto, la primera de entidad estructural y modernización tecnológica que se lleva a cabo en los últimos 13 años. Esta inversión tendrá un coste final de 32 millones de euros, repartidos entre las dos fronteras consideradas por Europa puntos estratégicos para frenar la entrada de personas de forma ilegal a territorio común europeo, procedentes del Magreb y África subsahariana. Interior afirma que “las obras en la valla fronteriza son las de mayor trascendencia, tanto desde un punto de vista operativo y de lucha contra las redes de tráfico de personas, como por la mayor complejidad técnica en su ejecución”. La nota ministerial aclara que “para la realización de estos trabajos, se ha hecho previamente un estudio técnico completo de la situación actual de las infraestructuras fronterizas, la identificación de los tramos de actuación de las mismas teniendo en cuenta los puntos más vulnerables, la búsqueda, análisis y evaluación de alternativas técnicas y la propuesta de solución a la vista de las alternativas evaluadas. El citado estudio ha corrido a cargo de la empresa pública Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España (ISDEFE), dependiente del Ministerio de Defensa”.
La empresa publica Transformación Agraria S.A. (TRAGSA) ha sido la encomendada por el Ministerio del Interior para acometer las obras como medio propio de la Administración General del Estado, que llevará a cabo a partir del mes de noviembre la recimentación del vallado y la sustitución de las concertinas, así como la construcción de nuevos tramos en las zonas de mayor vulnerabilidad, con un incremento de altura de alambrada de hasta diez metros.
Además de este refuerzo de la valla perimetral en Ceuta y Melilla, ya han sido ejecutadas dos de las intervenciones estratégicas del Plan aprobado por el Gobierno. Se trata del nuevo sistema de circuito cerrado de televisión en el perímetro fronterizo de Ceuta que incluye 66 cámaras, 14 de ellas térmicas, y que está operativo desde mayo de 2019; y de la instalación de sistemas de reconocimiento facial en los puestos fronterizos de El Tarajal (Ceuta) y Beni Enzar, Barrio Chino, Mariguari y Farhana (Melilla).
En proceso de ejecución se encuentran las obras de adecuación de las zonas de tránsito de peatones y otras mejoras en el puesto fronterizo de El Tarajal, así como la instalación de una nueva red de fibra óptica y ampliación del sistema de circuito cerrado de televisión en el perímetro fronterizo de Melilla.
Para desarrollar este proyecto se han mantenido diferentes reuniones de coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las delegaciones del Gobierno para reforzar la seguridad del vallado durante la ejecución de las obras.
Asimismo, el Ministro del Interior ha venido informando desde las fases iniciales a su homólogo del Reino de Marruecos del objetivo y naturaleza de este Plan y de la necesidad de coordinación en las medidas de seguridad precisas a ambos lados de la frontera durante el periodo de realización de las obras.