/Texto y fotografías: Daniela Anomar/
Ya hemos visto en todo tipo de medios la indignante violación a los derechos humanos que se están cometiendo en Chile. La explosión social y el levantamiento del pueblo chileno ha tenido que soportar la dura y brutal represión en estos ocho días de protesta, por parte de militares y policías. Homicidios, golpes, torturas, mal tratos. Uno de los temas aún ciertamente invisibilzado es la violencia sexual. Desde el día uno hemos visto variadas denuncias: abusos, vejaciones, tocaciones, desnudamientos, amenazas, torturas y violaciones. Se habla también de mujeres desaparecidas.
Mientras instituciones como el INDH (que depende del Estado) manejan ciertas cifras, agrupaciones feministas organizadas están trabajando para entregar las cifras que realmente corresponden.
Las evidencias están, audios, videos, relatos de violencia sexual contra las mujeres y ahora se conocen casos contra las disidencias. Un joven fue apresado por la policía y violado por ser homosexual.
Luego de conocerse los reportes del Institución Nacional de Derechos Humanos, la actual Ministra de la Mujer y Equidad de Género, Isabel Plá, nos dice que ella no ha recibido ninguna denuncia. Ningún agente del Estado ha sido formalizado.
“Se están haciendo catastros de mujeres agredidas sexualmente y ahora están en el trabajo de recopilar todas las denuncias. Hay una organización de Derechos Humanos que se llama Piquete Jurídico que está sistematizando todas estas violencias y va a hacer una denuncia a la Comisión Interamericana de DDHH” nos relata en una entrevista Francisca Rusque, activista de Ni Una Menos Chile.
Las evidencias están y no habrá impunidad.