A pesar de la prohibición de las manifestaciones y el desalojo del campamento de Trafalgar Square, Londres, la protesta de la Extinction Rebellion no se detiene y más bien se expresa en formas nuevas y creativas.
La prohibición ha sido ampliamente criticada. «Si oponerse a la crisis climática y ecológica y defender a la humanidad está en contra de las reglas, entonces las reglas deben romperse», escribió Greta Thumberg en un post. Para Amnesty International la prohibición es ilegal, mientras que el Partido Laborista la calificó de «ataque a las libertades civiles».
Los eurodiputados verdes Caroline Lucas y Ellie Chowns, el periodista de Guardian George Monbiot y otros han presentado hoy un recurso contra la prohibición ante el Tribunal Supremo en nombre de Extinction Rebellion.
Por la tarde, después de una nueva asamblea en Trafalgar Square, George Monbiot fue arrestado. «Es el único poder real que ha llamado a la protesta climática. Al poner en riesgo nuestro cuerpo y nuestra libertad, hacemos imposible ignorar este gran tema», dijo.
La Extinction Rebellion se dirigió a los principales medios de comunicación, con guarniciones delante de las oficinas de Google, el grupo News Corp de Rupert Murdoch, HarperCollins Publishers y News UK, editores del Times, el Sunday Times y el Sun, pidiendo que se diera prioridad a la cuestión de la emergencia climática y ecológica.
En las protestas que comenzaron el 7 de octubre, 1.489 personas han sido detenidas hasta la fecha.
Traducción del italiano por Nicole Salas
