Hay más de 100.000 firmas sobre la mesa para la Iniciativa de los Glaciares. Con la ayuda de WeCollect, las firmas se recogieron en sólo cuatro meses.

El Consejo Federal ya ha reaccionado y, bajo la presión de la iniciativa, ha endurecido el objetivo climático de Suiza. Quiere cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050, pero todavía faltan medidas concretas. La Iniciativa de los Glaciares sigue siendo necesaria por las siguientes razones:

El comunicado de prensa muestra que las emisiones agrícolas están incluidas en el objetivo de cero neto. Sin embargo, no está claro si también se incluyen las emisiones de la aviación internacional.

El trayecto de reducción y un mecanismo de control son importantes. La segunda es asegurar que se cumpla el camino planeado. En su disposición transitoria (2), la Iniciativa de los Glaciares estipula que las emisiones domésticas deben reducirse «al menos linealmente». El Consejo Federal carece de este compromiso. Sin embargo, con una trayectoria de reducción puramente lineal, Suiza está haciendo una contribución inadecuada al objetivo de 1,5 grados.

En la conferencia de prensa, el consejero federal Sommaruga mencionó la posibilidad de compensar compensaciones en el extranjero. Esto no es compatible con un objetivo de cero: si las emisiones en todo el mundo tienen que bajar a cero, no hay nada que compensar. Si Suiza depende de la compensación exterior mientras esto sea posible, las reducciones internas serán aún más difíciles después.

Todavía no existe un compromiso claro con la descarbonización (apartado 3 de la Iniciativa sobre los Glaciares). La descarbonización es la consecuencia lógica del «cero neto».

La nueva Ley de CO2, tal como está siendo discutida actualmente por la Comisión de Medio Ambiente del Consejo de Estados (UREK-S), no va por buen camino porque su objetivo es reducir las emisiones domésticas en sólo un 30 por ciento para el año 2030 (en comparación con los niveles de 1990). En cambio, necesitaría una reducción interna de al menos el 50 por ciento.

En el futuro, «también se utilizarán tecnologías que eliminen permanentemente los gases de efecto invernadero de la atmósfera y los almacenen». No lo rechazamos, pero debemos ser conscientes de que estas tecnologías sólo están disponibles en una medida muy limitada y que su potencial futuro es desconocido. No debemos confiar en que pronto estarán disponibles a gran escala.

Mientras no esté claro qué medidas precisas se tomarán, se necesita la iniciativa de los glaciares.


Traducción del alemán por Sofía Guevara