Comunicado de Prensa:
«Hace un rato finalizó nuestro segundo encuentro nacional. Tuvimos la participación de sobrevivientes de varias ciudades del país y en esta jornada refrendamos nuestro compromiso de seguir luchando por terminar con los crímenes sistemáticos de abuso contra la infancia, adolescencia y adultos vulnerables cometidos en espacios eclesiásticos.
La sociedad hoy sabe que los abusos cometidos por agentes de la Iglesia Católica en Chile corresponden a un problema sistémico, cultural y organizacional de dicha institución, a una cultura nefasta y -lo más importante- son una cuestión de Estado por tratarse de delitos que atentan contra los derechos humanos.
Exigimos a los poderes del Estado, ejecutivo, legislativo y judicial, a hacerse cargo de esta problemática intolerablemente más común de lo que quieren aceptar.
Que Fiscalía y Ministerio Público, hagan su trabajo con celeridad. Cada día que pasa las secuelas del abuso se llevan la vida de un chileno abusado por religiosos. Que las autoridades del ámbito educativo pongan mucha atención a los colegios, hogares y otros espacios donde hay menores al cuidado de la Iglesia Católica, institución que quiebra sistemáticamente el pacto social y es en la actualidad muy peligrosa para las infancias.
Que nuestros Parlamentarios, nos acompañen en la demanda al Poder Ejecutivo para que de una vez por todas se cree una Comisión que investigue estos delitos, establezca una verdad histórica y genere los mecanismos de reparación necesarios para los sobrevivientes y sus familias. Somos un problema de salud pública.
Naciones Unidas ya reclamó a Chile la creación de una Comisión investigadora por los crímenes sistemáticos ocurridos en ámbitos del SENAME donde justamente uno de los regentes habituales es la Iglesia Católica, detrás de diferentes modelos jurídicos como fundaciones o sociedades.
En tanto el Estado de Chile no se haga cargo de su responsabilidad, nosotros ocuparemos este espacio reclamando al Estado su papel pero también recibiendo a las personas que deseen acercarse en calidad de pares. Esta Red la integran sobrevivientes que dan su tiempo y trabajo para ayudarnos.
Agradecemos a los profesionales e instituciones que se han acercado a ofrecer su ayuda ad-honorem y queremos decirles a ellos y a quienes deseen hacerlo que en las siguientes semanas activaremos una modalidad de red de acompañamiento profesional, legal y psicológico, en todo el país. Este servicio permitirá contactar a cada persona que ha padecido este delito con quienes puedan asesorarle en su territorio, rompiendo con la centralización que sabemos pesa demasiado.
Tomamos como propio el desafío de comunicar pero también de poder acompañar a los sobrevivientes invisibilizados. Entendemos que el trabajo periodístico y mediático parece más atractivo cuando se trata de los jesuitas, los maristas o involucra a obispos y cardenales de alto perfil, pero queremos que sepan que hay otras situaciones que siendo desconocidas por la opinión pública, trataremos de develar, para que la justicia, la reparación y la verdad, sean la meta de tantas y tantos. Somos un espacio que hoy quiere cobijar, a aquellas y aquellos que carecen de la cobertura y de los ojos de la sociedad y del Estado.
A partir de este momento en nuestra web pueden consultar el mapa de abusos en Chile actualizado. Lo que allí vertemos es información disponible en medios de prensa, es apenas la punta del iceberg de todos los casos que la Iglesia Católica sigue ocultando. A dicha institución no se le puede tratar como parte de la solución porque es parte del problema. Llamamos al Estado a accionar con todo el peso de la ley sobre la misma para que entregue los antecedentes de que dispone y deje de esconderse en el derecho canónico y el secreto pontificio ¿o acaso el monarca que vive en el Vaticano manda en suelo chileno?
Llamamos públicamente a los poderes del Estado a reaccionar. Nos preocupa el silencio en las causas donde hay religiosos involucrados, no queremos ser suspicaces pero el Sr Abbott tiene que aclararnos a todos qué está pasando tras los cambios de fiscales. Nos preocupa el silencio del Presidente Piñera ante la solicitud expresa de crear una Comisión investigadora. El goteo de denuncias NO ayuda a la sociedad, menos todavía a quienes se siente católicos. Los países donde se avanzó con esta modalidad, como Australia, son un ejemplo de sanación para toda la sociedad. La magnitud de esto lo amerita.»