La Kings Bay Plowshares 7 en la corte federal presentó hoy argumentos orales sobre la negación de las mociones previas al juicio para desestimar los cargos en su contra. Al comparecer por primera vez ante la jueza Lisa Godbey Wood, quién será la jueza de primera instancia, cuatro de los acusados pro-se y dos de los abogados hablaron sobre por qué consideraban que el magistrado Benjamin Cheesbro había fallado en su contra después de dos días de audiencias que ocurrieron durante noviembre del año pasado. El enfoque principal de la audiencia de hoy fue la Ley de Restauración de la Libertad Religiosa (RFRA, por sus siglas en inglés), que se está utilizando por primera vez en un caso como éste.
A los acusados sólo se les dio 90 minutos para todos los argumentos. El gobierno utilizó 30 minutos de su tiempo asignado. La sala del tribunal estaba repleta de más de 60 partidarios, entre ellos el actor y activista Martin Sheen, y 25 se quedaron fuera por falta de espacio. Fue la primera vez este año que los tres acusados todavía encarcelados en la cárcel del Condado de Glynn por 16 meses, Mark Colville, el Padre Steve Kelly, SJ, y Elizabeth McAlister, vieron a sus codemandados. Desde el pasado mes de noviembre se les ha impedido la preparación jurídica en persona.
Stephanie McDonald, abogada de Martha Hennessy, comenzó argumentando que el gobierno no cumplió con sus obligaciones bajo la RFRA. La ley requiere que haya una consideración específica e individual para las creencias y acciones de cada acusado.
La acusada Clare Grady dijo que el intento del gobierno de criminalizar la práctica religiosa de los acusados no sólo es una carga sustancial indebida, sino también una violación de la RFRA, la ley del país. Mark Colville, Patrick O’Neill y Carmen Trotta también hablaron en la corte.
Bill Quigley, abogado de Elizabeth McAlister, comenzó el alegato final recordando a la corte la creencia religiosa «No matarás». Resumió sus comentarios señalando que las atrocidades cometidas por Hitler y Stalin serían insignificantes en comparación con las armas nucleares Trident jamás utilizadas. Dijo: «En 30 minutos después del lanzamiento, millones de personas inocentes serán asesinadas».
El juez invitó a responder en el plazo de una semana a los argumentos presentados hoy. Indicó que prestaría una especial atención a estas complejas cuestiones y que, de ser necesario, programaría sin demora un juicio.
Traducción del inglés por Nicolás Soto