Con el eslogan «Mayores Sin Armarios: ¡Historia, Lucha y Memoria! Por una ley estatal”, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB) y COGAM, colectivo LGTB+ de Madrid han convocado la manifestación del Orgullo LGTBI 2019 que ha tenido lugar este 6 de julio en Madrid y que sido la más reivindicativa de los últimos años.
De Atocha a la plaza de Colón y en una tarde calurosa, alrededor de 1.500.000 personas -según los organizadores- han participado en esta gran movilización en la que se ha convertido la fiesta del Orgullo en la capital española.
Miembros del partido conservador Ciudadanos han querido participar y un grupo de manifestantes se lo ha impedido como respuesta a su política de pactos con la extrema derecha de Vox, lo que ha hecho que un rato después hayan tenido que abandonar el lugar escoltados por la policía.
Fotos: Ariel Brocchieri
Con el lema «Mayores sin Armarios: ‘Historia Lucha y Memoria! Por una Ley Estatal», este año el movimiento LGTBI conmemora el 50 aniversario de los disturbios de Stonewall, que tuvieron lugar en Nueva York y que fueron origen del movimiento en todo el mundo. Para ello, han portado la pancarta de cabeza referentes históricos del movimiento español, como Armand de Fluvià -primer homosexual en salir del armario públicamente-, participantes de las primeras manifestaciones LGTBI en Barcelona o Madrid- como María Giralt o Ramón Linaza, Carla Antonelli -el mayor referente del activismo transexual-, la presidenta de la FELGTB -Uge Sangil- o Carmen García de Merlo -presidenta de COGAM, entre muchos otros.
Detrás de la pancarta de cabeza y con el lema «Ni un paso atrás» respecto a los derechos conquistados a lo largo de décadas, han marchado numerosas organizaciones sociales, partidos políticos y sindicatos.
El acento este año ha estado en defender los derechos conseguidos hasta aquí, frente a quienes los ponen en cuestión. «Necesitamos parar a la ultraderecha que ha entrado en las instituciones. Les decimos que no vamos a dar ni un paso atrás«, ha declarado Uge Sangil, presidenta de la FELGTB. «No vamos a consentir que haya un retroceso en los derechos LGTBI», ha dicho Carmen Garcia de Merlo, presidenta de COGAM, en declaraciones a los medios antes de comenzar a andar la manifestación.
Ante el avance de la extrema derecha, los organizadores decidieron poner como condición para participar en el evento que los partidos políticos firmaran un documento, en el que se comprometían a no llegar a pactos de gobierno con Vox, dadas sus posiciones discriminatorias hacia el colectivo LGTBI y el anuncio de la eliminación de derechos conquistados por el mismo.
Ciudadanos, un partido de derechas que ha firmado acuerdos de gobierno en diferentes puntos de la geografía española con Vox y que no ha querido firmar dicho documento, ha visto denegada su petición de participar en la manifestación con una carroza y algunos cargos públicos, cuando se han dispuesto a participar en la manifestación reivindicando que ‘el Orgullo es de todos’, se han encontrado con que un grupo de manifestantes no les ha permitido pasar mientras representaban una performance con la que buscaban desenmascarar el doble discurso (en las instituciones ultraderecha y en la calle progresista) de la formación naranja. Se han vivido momentos de tensión y, una hora y media después, los de Ciudadanos han tenido que abandonar la manifestación, escoltados por la policía y entre abucheos de parte del público. Todo ello ha retrasado el desarrollo de la manifestación.
Pero esta edición del Orgullo, además de reivindicar la memoria del movimiento y de insistir en no dar un paso atrás, ha planteado seguir avanzando también. Y para ello, se ha pedido «la aprobación urgente de una Ley Estatal de Igualdad LGTBI que garantice la despatologización y el derecho de autodeterminación de las personas trans, la correcta atención sanitaria para las personas LGTBI, protocolos específicos contra el acoso escolar por LGTBIfóbia o sanciones para quienes imparten supuestas terapias de reconversión o agreden a personas LGTBI por el mero hecho de serlo o parecerlo»
La gran movilización ha terminado con la lectura de un manifiesto en la plaza de Colón, un lugar emblemático en el que en febrero pasado tuvo lugar una concentración de toda la derecha española, con representantes del Partido Popular, Ciudadanos y Vox: la primera muestra de cómo toda la derecha española iba extremando sus posiciones al tiempo que legitimaban al ultraderechista partido de Vox.
Como otros años, ha cerrado esta gran movilización el desfile de carrozas que pone siempre el tono lúdico a esta fiesta reivindicativa.
A última hora, se ha conocido que, avanzada la noch,e la barandilla de una de las carrozas ha cedido y han caído cuatro personas que han resultado heridas, una de ellas grave.