En abril de 2019, Pressenza organizó eventos en París y Burdeos para celebrar el décimo aniversario de la agencia.
El evento en París se tituló «¿Cuál es tu compromiso con el planeta?” y dio lugar a varias entrevistas, aquí presentamos la realizada con Thierry Chen, miembro de Extinción Rebelión.
Créditos del video: Brigitte Cano. Entrevista realizada por Mauricio Alvarez.
Haga clic en la imagen para ver el video.
Pressenza: Gracias por aceptar esta invitación. Cuéntanos sobre ti ¿Qué estás haciendo ahora? ¿Cuál es tu compromiso con el planeta?
Thierry Chen : Gracias por la invitación. Mi nombre es Thierry, soy miembro de Extinción Rebelión y trabajo como ingeniero en el suministro energético del edificio. Realmente me involucré durante un año, estaba muy atento a todos las problemáticas que iban surgiendo, por eso quise trabajar con respecto a los rechazos del edificio, en todos los temas relacionados con los tamices térmicos, y a medida que fui tomando conciencia de estas cuestiones, me di cuenta de que no era así como el mundo cambiaría y que teníamos que actuar y hacer las cosas, entonces pensé que no podía seguir así y me vi a mí mismo volviéndome más activista.
Entonces, descubrí el movimiento de Extinción Rebelión durante una protesta en la que bloquearon puentes en Londres, y en donde también pidieron que el movimiento se internacionalizara, de manera que fue una oportunidad para lanzar el movimiento en Francia. En todo caso, había mucha gente que estaba motivada y como lo que está en juego es global, ya que es un problema, entre otros, de destrucción de la vida y del calentamiento global que concierne a todo el mundo, me pareció muy relevante crear un movimiento internacional sobre estas cuestiones. Nosotros sabemos muy bien que hay otros movimientos que existen en Francia, como ANV-COP21 u otros, que están ahí para defender esta diversidad, sin embargo solo es en Francia. Luego, en los otros países hay otros movimientos y, precisamente, no poseemos un vínculo con todos ellos, de ahí que me haya involucrado.
Lanzamos el movimiento a nivel mundial a principios de diciembre de 2018, este se estructuró el día del encuentro oficial, ya que tuvimos nuestro día de declaración de rebelión el pasado 24 de marzo, decretando que volveríamos a la rebelión en Francia, y a partir de ese día iniciamos acciones de desobediencia civil, acciones no violentas, globalmente desestabilizadoras en el sentido de que estamos tratando de perjudicar a las empresas o al gobierno en puntos que consideramos realmente injustos o legítimos.
Por ejemplo, recientemente se ha llevado a cabo una acción contra la industria textil, que es la segunda industria más contaminante. En esta se explota a los seres humanos, a los hombres y a los niños en condiciones deplorables, de manera que se ha emprendido una acción para denunciar todo lo que hace esta industria, que mata a los seres humanos y, en últimas instancias, lo destruye todo. La denuncia es el primer tema. Hay un segundo aspecto: tratamos de crear conciencia, pero de una manera realista, realmente decimos las cosas concretas y de manera cruda. Me gustaría hablar de nuestras reivindicaciones, tenemos cuatro, y la primera es decir, que al cabo de un tiempo no podemos seguir escondiéndonos de la realidad del mundo, ni tampoco el gobierno, las empresas y otros pueden diluir todo lo que está ocurriendo en la actualidad, en particular cuando se trata de la práctica del greenwashing.
Así que nuestro objetivo es precisamente mostrar las cosas concretamente como existen, las reales. Tal vez sea un poco impactante, pero hay que ser consciente de ello. Cuando hay un incendio en su casa, no tiene elección, tiene que irse. Ahora, no vamos a decir: algo está ocurriendo en su casa, no, hay que decir que el fuego está ahí, y ese es realmente el problema actual. Hay muchas personas que no son necesariamente conscientes del estado actual del mundo y necesitan que se les informe de ello.
¿Tenemos tiempo? Es una gran pregunta, y el objetivo es pasar a la acción, hacer que la gente reaccione y, al mismo tiempo, hacer que las cosas sucedan.
P : ¿Cuándo recibiste ese llamado personal? Porque dar el primer paso y pasar de ser una persona neutral a ser una que va hacia el compromiso, pasar de ser una persona que mira la situación desde lejos, a mostrar iniciativa, es decir, comprometerse… ¿Cuál fue el detonante?
TC : Fue un largo viaje, fui a la facultad de ingeniería, estuve muy involucrado en la tecnología, en la búsqueda de soluciones…, también trabajé en pilas de combustible y en hidrógeno. He visto que hay límites a todo esto, y a medida que avanzamos nos damos cuenta de que hay demasiados problemas que resolver. Debemos enfocarnos en un tema, también podemos generalizar, pero al final nos enfrentamos a problemas de recursos, o por ejemplo problemas de minería, o muchos otros. No tenemos suficientes recursos para realizar las cosas, y ¿cómo podemos obtener más de aquello? No tenemos nada debido a que no tenemos suficiente platino (por ejemplo, o un producto para crearlo) así que estamos un poco limitados. Nos volvemos más y más conscientes de las cosas, un poco de manera sistemática. Después de eso, me interesé en el colapso de las cosas, y también jugó un papel importante, porque nos dimos cuenta de que podríamos estar yendo hacia un colapso de la sociedad. No es muy tranquilizador, pero sientes que todavía hay trabajo por hacer y a medida que avanzamos, sé que no puedo seguir estando en este sistema como he sido condicionado a estar, es decir, en el modo de ingeniería, hacer y crear cosas nuevas, permanecer en un sistema que no se ajusta a mí.
P : Y en la actualidad, ¿cómo has logrado encontrar esta armonía entre tu trabajo y tu compromiso?
TC : Es muy difícil. Cada semana me hago esta pregunta y cada semana quiero renunciar, pero al mismo tiempo sé que tenemos que vivir con estas contradicciones en el sistema actual. Sobre todo porque si realmente queremos ser irreprochables, al estar totalmente de acuerdo con nosotros mismos en todos estos temas, ya no estaríamos conectados, no estaríamos en la ciudad, sino en la naturaleza totalmente marginal. Y al final no podemos actuar, ya que todavía tenemos que estar en el sistema para hacerlo y por eso mi objetivo es quedarme en París, porque París es sostenible, creo que esta ciudad es el núcleo donde hay que hacer las cosas. Pero a su vez, si estás en París tienes que tener dinero porque vivir en París no es fácil. Me pregunto cómo hacerlo, si debo seguir trabajando porque sigo ganando un sueldo bastante bueno, porque soy ingeniero, y eso me permite vivir y, al mismo tiempo, hacer cosas por mi cuenta. Si realmente quisiera hacer algo más social o de otro tipo, tal vez no tendría ese compromiso y estaría más preocupado por tener que vivir en París que por comprometerme a actuar. Es toda una cuestión de compromiso, y pienso mucho en términos de eficiencia, si hago algo que me conviene más, podría seguir haciendo las cosas de manera eficiente, y es una cuestión que está ahí todos los días. Me cuestiono esto todos los días y tal vez esté cambiando. El objetivo es hacer que las cosas cambien, así que empiezo por mí mismo de esta manera, creando un cambio.
P : ¿Qué es lo que te aporta personalmente este compromiso? Antes de que te sintieras indiferente, experimentaste un detonante, te volviste más consciente y decidiste actuar. ¿Ha cambiado algo personalmente en tu interior haciendo acciones no violentas?
TC : Sí, creo que he cambiado. Esto se ha convertido en un cuestionamiento sobre el propósito de lo que quiero hacer: qué significado darle a mi vida, temas como ese. Y es más como esa pregunta, en el sentido de encontrarle un mejor sentido a estudiar y querer ganar dinero, ya que luego finalmente, ¿para qué? Ahora sé que tengo un propósito, hacer que las cosas cambien para que el mundo, entre comillas, sea mejor, aunque esto sea muy utópico, me digo a mí mismo: Estoy aquí, voy a luchar por ello porque hay gente, niños que van a nacer, tengo una sobrina y un sobrino que llegarán pronto, y no quiero que estén dentro de diez o veinte años en un mundo totalmente destruido, en guerras, o en la precariedad, o incluso que vivan más así, que mueran, no quiero que esto suceda. Así que este compromiso me empuja a hacer cosas que creo que hace tres o cuatro años nunca hubiera querido hacer porque pensaba que quería vivir tranquilamente. Excepto que, al ser conscientes de todos estos problemas, no podemos negarlos, debemos aceptar la situación y actuar. Y así es como yo lo veo: tenemos que hacer algo. Pues bien, hay personas que no necesariamente quieren actuar, pero yo, a mi manera de ser, no puedo dejar de actuar, de lo contrario estaría demasiado en contradicción conmigo mismo. Es realmente un equilibrio que hay que tener y siempre puede evolucionar.
P : ¿Cómo está estructurado el movimiento de Extinción Rebelión? ¿Es horizontal o hay una jerarquía?
TC : Es realmente horizontal, no hay ningún líder ni nada. Trabajamos en grupos temáticos: un grupo se ocupa de la acción logística; otro de la sensibilización y la formación, es al que pertenezco; otro de la investigación sistémica, este monitorea y observa todo lo que sucede en el mundo para tener una base para explicar las cosas; otro se encarga del activismo; otro de la cultura regenerativa, este permite mantener el movimiento para que la gente no se agote y también apoye, entre otros, a los que potencialmente van a la cárcel. Así que hay bastantes grupos temáticos, y estos están organizados con coordinadores, que son referencias y representan a los grupos, ya que hay más encuentros globales entre todos.
Somos por tanto muy descentralizados, Extinción Rebelión Francia está configurada por grupos locales, en Ile de France, Lyon, Burdeos y otros, casi en todas partes, no conozco a todos los grupos locales que existen. El objetivo es precisamente que los grupos temáticos, que existen a nivel nacional, estén ahí para proporcionar herramientas para que los grupos locales actúen de forma autónoma. Luego, a la hora de llevar a cabo las acciones, son los grupos locales los que se organizan con las herramientas que tienen, y crean afinidades y movilizan a la gente para que actúe. Por lo tanto, la meta es realmente estar totalmente descentralizados y tener grupos de acción en todas partes que lleven a cabo sus acciones.
No estamos en un sistema jerárquico, hay referentes, coordinadores, para tener el vínculo de todos modos, ya que es difícil tener cohesión cuando actuamos a nivel nacional, porque esto va más allá del círculo del individuo, por lo que debemos lograr este objetivo global. Por lo tanto, el objetivo es realmente permanecer en esta horizontalidad, y no cambiar a líderes potenciales u otros que pueden aparecer, la idea es precisamente cambiar los papeles de los coordinadores, incluso en los medios de comunicación, si hay gente con la que hablar en los medios de comunicación, nunca es la misma persona. Todavía nos hacemos llamar miembros de Extinción Rebelión, pero a menudo decimos que hablamos en nuestro nombre, porque no representamos al movimiento ya que hay cosas que no están realmente definidas y que son muy personales.
P : ¿Cómo van las cosas con otras organizaciones que practican desobediencia civil en Francia? porque su organización viene de Inglaterra originalmente, ¿Cómo les acogen en este entorno franco-francés?
TC : En primer lugar, en relación con Extinción Rebelión a nivel mundial, también creamos vínculos con todos los demás grupos de otros países, y todavía estamos distanciados. Tenemos cuatro demandas en Francia. Inglaterra solo tiene tres en principio, tenemos diferencias, pero estamos conectados.
En comparación con otros grupos de desobediencia civil que existen: en su mayor parte, somos socios. Estamos trabajando con ellos y creo que esto es muy bueno, ya que estamos creando otros movimientos que pueden ser complementarios y a los que otras personas pueden adherirse. Somos más resistentes así, porque si solo hubiera un movimiento, y si a causa de algo inesperado ese movimiento se disolviera, no quedaría nada en el costado. Precisamente, con la pluralidad de movimientos que existen, somos más resistentes y tratamos de trabajar en colaboración con todos. Extinción Rebelión, al ser tan nuevo, ya que se remonta al pasado mes de diciembre, obviamente no tiene miembros con mucha gente que fuera necesariamente muy activista antes, así que lo descubren en la práctica. A otros grupos, como Les Désobéissants o Diffraction, se les pidió que nos formaran en la desobediencia civil. Estamos aquí para colaborar y luego participamos en la acción, y precisamente el 19 de abril, en la acción «Bloqueemos la república de los contaminadores», somos socios de los otros grupos organizadores. Es una acción que nos habla, que nos parece relevante. Participaremos en este tipo de protestas, ya que el objetivo es crear sinergias y al mismo tiempo estar en el movimiento, somos diferentes, quizás no tenemos las mismas demandas, no tenemos la misma radicalidad, pero tratamos de estar en sinergia y estar en colaboración.
P : ¿Cómo ves el futuro, en los próximos 20 años? ¿Eres positivo sobre el futuro del planeta y lo que sucederá, o tienes dudas sobre nuestra capacidad para transformar este sistema y avanzar hacia un futuro mejor?
TC : En cualquier caso, no creo que sea muy agradable. Positivo o no, no lo sé. Porque, ¿qué significa esto de ser positivo? ¿Que nos las arreglamos para ahorrar un poco? Sabemos hacia dónde nos dirigimos ahora. A partir de ahí, ser positivo significa que se ha conseguido aliviar un poco la situación; si solo habláramos de la población, sabemos que habrá una disminución de esta: ¿es positivo si solo sobreviven el 50%, el 80% o el 90%? No lo sé, así que no voy a hablar de positivo o no, porque en cualquier caso ahora mismo estamos en una situación muy complicada. Hablar desde la positividad o no de una situación que quieres tener… tal vez yo me encuentre en una posición negativa, no sé. Pero eso no significa que sea pesimista u optimista, no podemos hablar de optimismo o pesimismo, creo que tenemos que hacer cosas, no tenemos elección, tenemos que actuar, tenemos que intentar, en cualquier caso, para mí, con la estrategia que me parece más relevante para cambiar las cosas.
Entonces veo un futuro sombrío en sí mismo, pero tampoco podemos saberlo, porque no sabemos cómo va a ser el cambio climático o la escasez de agua, entre otros. ¿Quizás afectará a algunas regiones más que a otras, o seguiría estando en París? No lo sé, pero en general no será agradable. Personalmente, ¿estaré en una mejor situación o no? Ni siquiera estoy seguro de seguir aquí, estoy abierto a todo, estoy tratando de actuar. No es que niegue el futuro, mi objetivo de ser consistente es que cada día trate de actuar de la manera que más me convenga respetando mi ética personal para que suceda lo mejor posible después, pero no tengo control sobre el futuro, trato de hacer lo mejor que pueda y luego veremos cómo sucede, pero en general veo un futuro oscuro.
P : Muchas gracias.
Más información:
Evento Burdeos: [10 años de Pressenza – Burdeos] Exposición fotográfica y presentación de debates
Entrevista con François Pellegrini: «Estamos en una fase de inflexibilidad, los fermentos del cambio buscan expresarse», François Pellegrini
Entrevista con Patrick Maupin: Acceso a la información para los ciudadanos: entrevista con Patrick Maupin, Greenpeace
Evento París: [10 años Pressenza – Paris] Evento: «¿Cuál es tu compromiso con el planeta?»
Entrevista con Thierry Chen: [10 años Pressenza] Entrevista con Thierry Chen, de Extinción Rebelión
Traducción del francés por Rosalía Briones