Por La SDJ De Mediapart desde su blog.
Más de treinta compañías de periodistas expresan su solidaridad con sus colegas de Disclose y Radio France, convocados por la DGSI en el marco de una investigación por «comprometer el secreto de la defensa nacional». Ellos solo han hecho su trabajo: llevar la información de interés público a la atención de los ciudadanos.
El lunes 15 de abril, el sitio de investigación Disclosure reveló, en colaboración con varios medios de comunicación (entre ellos Mediapart – nota del editor), un informe clasificado como «defensa confidencial» que documenta el uso de armas vendidas por Francia a Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos en la guerra de Yemen, que se ha estado llevando a cabo desde el año 2015 a expensas de la «peor crisis humanitaria del mundo», según la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Este documento, cuya publicación no comprometía en modo alguno la seguridad de los agentes franceses en el medio, fue revelado debido a su evidente interés por el público. Esto invalida el discurso oficial del gobierno francés, que afirma que este arsenal se utiliza únicamente con fines defensivos.
Sin embargo, el miércoles pasado, dos periodistas de Disclose, Geoffrey Livolsi y Mathias Destal, y un periodista de la unidad de investigación de Radio France, Benoît Collombat, colaborador de estas revelaciones, fueron convocados para mediados de mayo por la Dirección General de Seguridad Interior (DGSI), en el marco de una investigación preliminar por «comprometer el secreto de la defensa nacional», iniciada por la Fiscalía de París a raíz de la presentación de una denuncia por parte del Ministerio de Defensa.
Nosotros, las empresas de periodistas y editores, expresamos nuestra plena y total solidaridad con nuestros colegas, quienes solo han hecho su trabajo: poner en conocimiento de los ciudadanos información de interés público sobre las consecuencias de la venta de armas en Francia. A partir de estas revelaciones, el gobierno ha guardado silencio sobre los hechos. Hoy, por haber expuesto esta información, tres periodistas se encuentran bajo la amenaza de un procesamiento por un delito punible con una pena de prisión, cuyo objetivo evidente es conocer las fuentes en las que se originó su trabajo.
En estos tiempos de grave preocupación por la libertad de informar, estas convocatorias nos recuerdan, si fuera necesario, lo esencial que es reforzar la protección de las fuentes de información en Francia, consagrada por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos como «una de los pilares fundamentales de la libertad de prensa». El secreto de defensa no puede oponerse al derecho a la información, el cual es esencial para un debate público adecuado, ni puede utilizarse como una espada de Damocles para disuadir a los periodistas de investigar y publicar.
Signatarios: compañías de periodistas, editores y/o personal de Challenges, CNews, Courrier International, Europa 1, Francia 2, Francia 3 National, Francia Info, Franceinfo.fr, Francia Info TV, Francia Inter, France-Soir, L’Humanité, Le JDD, Libération, M6, Mediapart, Le Monde, Le Parisien-Aujourd’hui en Francia, Premières Lignes, RFI, RTL, Télérama, TF1, La Tribune, L’Obs, Les Échos, Le Figaro, Paris Match, l’AFP, RMC, BFM TV, France 24, La Croix, y Les Jours.
Traducción del francés por Rosalía Briones
